El ataque contra una diputada laborista, Jo Cox, en Leeds en el marco de la campaña previa a la votación sobre el Brexit ha provocado que Reino Unido paralice toda la actividad política vinculada con el referéndum del próximo 23 de junio.

El país digiere consternado como un partidario radical de abandonar la Unión Europea ha apuñalado y disparado contra la política, que está en estado crítico. También cargó contra un hombre que intentó defender a Cox.

Reacciones

Las reacciones no se han hecho esperar. El primer ministro británico, David Cameron, expresó a través de Twitter su “preocupación” por los hechos y por la tensión que ha generado la campaña previa a la votación. También se ha solidarizado con la familia de la diputada y ha decidido suspender todos los actos que tenía programados en Gibraltar. 

El líder del partido laborista y compañero de Cox, Jeremy Corbyn, ha usado la misma red social para expresar que estaba “completamente conmocionado”, mientras que el exalcalde de Londres y líder de los partidarios de que Reino Unido deje la UE, Boris Johnson, ha calificado de “horrible” la noticia. 

En clave española, el socialista Pedro Sánchez ha sido el primero en reaccionar. "Consternados por el brutal ataque que ha sufrido la parlamentaria británica Jo Cox. Toda nuestra fuerza y cariño", ha manifestado por la red social.