Alarma en el ente. La Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) ha encargado un informe jurídico ante la sospecha de que el nombramiento a dedo de Núria Llorach como nueva presidenta, en sustitución de Brauli Duart, pudo ser ilegal.

Según ha podido saber Crónica Global, varios consejeros de la CCMA denunciaron que la designación de Llorach tenía que haber sido sometida a votación en el Parlament, ya que es la Cámara catalana la que debe nombrar al máximo responsable de TV3 y Catalunya Ràdio.

Sin embargo, el hecho de que Duart, hombre de máxima confianza del exconsejero de Presidencia Francesc Homs, precisara que su renuncia era “temporal” dio lugar el pasado mes de abril a la libre elección de Llorach, que también es afín a CDC y que apela a su condición de presidenta en funciones.

Fuentes conocedoras del proceso aseguran que existe una profunda inquietud en la presidencia de la CCMA, que se une al malestar que la gestión de Llorach provoca en algunos sectores de CDC. “Llorach se limita a ejecutar lo que dice Duart, es decir, lo que manda Homs. No tiene mano izquierda”, afirman estas fuentes. Los convergentes consideran que han perdido la batalla mediática en favor de ERC, sin que un ente controlado por Homs haya podido --o querido-- evitarlo.