Aval simbólico del Ayuntamiento de Barcelona, dirigido por Ada Colau, a la política de la Generalitat en materia sanitaria. El consistorio ha presentado este viernes un informe que denuncia lo que considera "privatización" de la sanidad pública, con el principal argumento de que un 10% del presupuesto de la Generalitat para la atención sanitaria en la ciudad se contrata con centros privados con ánimo de lucro. El informe llega poco después de que el nuevo consejero de Salud, Toni Comín, haya expulsado de la red pública a dos hospitales privados. Y cuando ha apuntado a excluir también a un tercero, ubicado en Barcelona.
Según este informe, --que lleva el significativo título de 'Privatización y mercantilización en la asistencia sanitaria pública en Barcelona'-- elaborado a partir de dos estudios encargados por el ayuntamiento al inicio del presente mandato, la Consejería de Salud destina anualmente "más de 200 milllones de euros" a contratar con sociedades mercantiles en Barcelona, lo que significa el 10% del gasto del departamento en la ciudad.
Contra los "beneficios de los accionistas"
"No es aceptable que se repartan beneficios a los accionistas a partir de la prestación de servicios de salud que se financian con dinero público", ha proclamado Colau en la presentación del informe.
El ayuntamiento añade que, en un periodo de crisis y recortes presupuestarios, entre los años 2009 y 2014, la contratación del departamento a hospitales privados con ánimo de lucro ha aumentado un 25%, mientras que, en el mismo periodo, se ha reducido el gasto en atención hospitalaria de centros públicos y la contratación a centros privados sin ánimo de lucro.
El Sagrat Cor, en el punto de mira
El informe también señala a un centro concreto: el hospital Sagrat Cor de Barcelona, el único privado con ánimo de lucro de la ciudad incluido en la red pública. El ayuntamiento señala que este centro --en el punto de mira de la Generalitat, que ya excluyó de la red pública a otros dos hospitales privados de la provincia de Barcelona-- representa un 4% del gasto del departamento de Salud en atención hospitalaria en la ciudad, por un total de 59 millones de euros.
"Hay que trabajar para que estas empresas se excluyan progresivamente del sistema sanitario que se financia con fondos públicos", ha afirmado Colau. El Govern ya está actuando en esta misma línea, en cumplimiento con el acuerdo de Junts Pel Sí y la CUP que posibilitó la investidura del president Puigdemont. El acuerdo comprometía al ejecutivo a eliminar de la red de uso público los hospitales privados con ánimo de lucro.