Para la Consejería de Enseñanza de la Generalitat se trata de una jugada perfecta. La aplicación de la jornada intensiva en las escuelas, es decir, de 9 a 14 horas, supone un ahorro en becas-comedor y permite pacificar un sector, el del profesorado, afectado por los recortes.
Sin embargo, la iniciativa provoca discrepancias internas dentro del propio Govern, ya que el Consejo Asesor para la Reforma Horaria, organismo que depende de la Consejería de Presidencia, defiende un horario de 9 a 15 horas, incluyendo la comida a las 12.30 horas.
Votar el horario
La pretensión de extender esa jornada intensiva, que ya se aplica en secundaria, al nivel de primaria preocupa al PSC, que ha presentado una moción parlamentaria para que, entre otras propuestas, se someta a votación ese nuevo horario escolar.
“Nos preocupa la compactación de la jornada como generador de desigualdades y como obstáculo para la conciliación, pues muchos padres no pueden hacerse cargo de los niños por la tarde. Ahorrarse el dinero destinado a becas-comedor resulta perverso y puede provocar que los padres opten por la escuela concertada, donde hay jornada partida”, explica la diputada socialista Esther Niubó.
La sexta hora
En el curso escolar 2013-2014, el gasto ejecutado por ayudas individuales de comedor escolar ascendió a 39 millones de euros, cifra que, en el curso siguiente, subió a 47,5 millones. Unas cantidades que los socialistas consideran insuficientes, ya que ha aumentado el volumen de menores con escasos recursos.
El departamento de Enseñanza asegura que en todos los centros de máxima complejidad, es decir, donde hay una alta concentración de colectivos vulnerables, se mantiene la sexta hora (que fue suprimida por CiU) o se aplica un apoyo escolar especial.
Compromiso de Rigau
La ex consejera Irene Rigau prometió a los sindicatos que reduciría los horarios lectivos para compensar los recortes aplicados en este sector. Esa promesa ha sido heredada por su sucesora, Meritxell Ruiz.
El PSC propone en la moción tramitada la recuperación de la sexta hora en todos los centros públicos de educación primaria de Cataluña. Solicita, asimismo, la presentación ante la Comisión de Enseñanza del Parlament de una evaluación de los proyectos pilotos de compactación de la jornada implantados en infantil y primaria.
De momento, esa experiencia piloto se lleva a cabo en siete centros públicos catalanes. Cuenta con el rechazo de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Cataluña (FAPAC) y del Consejo Asesor para la Reforma Horaria, cuyo responsable es Fabian Mohedano.