El Gobierno de Carles Puigdemont ha respondido a la amenaza de impugnación del departamento de Asuntos Exteriores por parte del Estado, confirmando el rango de esta Consejería, que además potencia con una división interna en tres secretarías generales: la General, la de Asuntos Exteriores y de la Unión Europa y la de Transparencia y Gobierno Abierto. “El Govern otorga rango de departamento al área de Exteriores con la voluntad de explicar el proceso político que vive Cataluña y que puede aportar al mundo como país”, ha dicho la portavoz y consejera de Presidencia, Neus Munté.

Transparencia

El Gobierno español en funciones estudia la posible impugnación de esta Consejería por entender que las competencias en diplomacia exterior son exclusivas del Estado. La creación de la Secretaría de Transparencia supone la eliminación del Comisionado para la Transparencia, que hasta ahora dirigía Núria Bassols.

Munté ha explicado la reestructuración acordada en la reunión del Consell Executiu en varios departamentos de la Generalitat, así como nuevos nombramientos. Ha restado importancia al hecho de que David Elvira, nuevo director del Servicio Catalán de la Salud, haya trabajado en una empresa farmacéutica hasta hace poco.

Una de las novedades es la adscripción a Presidencia del negociado de Telecomunicaciones en general y del Centro de Seguridad de la Información (Cesicat) en particular. Este órgano está considerado como el embrión de la futura agencia catalana de inteligencia (CNI catalán).