Bahréin ha anunciado este lunes la ruptura de las relaciones diplomáticas con Irán, siguiendo así los pasos de Arabia Saudí, que hizo lo propio este domingo a raíz del asalto a su embajada en Teherán en represalia por la ejecución del clérigo chií Nimr al Nimr.

El Gobierno de Bahréin justifica su decisión a la vez que denuncia la "intervención flagrante y peligrosa" de Irán en sus asuntos internos así como el supuesto papel de Teherán en el fomento de disturbios y conflictos en la región, "proporcionando protección y apoyo a los terroristas y extremistas".

También califica de "violación flagrante" de los tratados internacionales los ataques contra la embajada saudí en Teherán y contra su consulado en la ciudad de Mashhad por parte de manifestantes que protestaban por la ejecución del clérigo.

48 horas para salir del país

En base a todo ello, Bahréin ha decidido "romper las relaciones diplomáticas" con Irán y ha dado a los miembros de la legación diplomática iraní 48 horas para abandonar el reino. Asimismo, Bahréin cerrará su Embajada en Irán y retirará a todo su personal de la misma.

Bahréin, un reino de mayoría chií pero gobernado por una familia real suní, ya había retirado a su embajador de Irán el pasado mes de octubre e hizo lo propio con su encargado de negocios en noviembre. Manama ha acusado reiteradamente a Irán de fomentar las protestas contra el Gobierno por parte de la comunidad chií.