El presidente en funciones de la Generalitat, Artur Mas, ha acusado este martes al Gobierno de cometer una "agresión institucional sin precedentes" a la Generalitat al poner condiciones especiales al Ejecutivo autonómico para acceder al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), y ha anunciado que las recurrirá jurídicamente.
En una rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo, Mas ha acusado al Estado de "atacar" a Cataluña y "castigar" al conjunto de catalanes por "defender ideas políticas respetuosas con los derechos humanos", en relación al proyecto independentista.
Y ha asegurado que las medidas del Gobierno responden a una "operación" para someter la Generalitat a la voluntad del Ejecutivo de Mariano Rajoy y suponen una "intervención más directa o más indirecta de la autonomía catalana".
Seguirá adelante con su plan secesionista
Mas ha avanzado que buscará "ensanchar" la base del independentismo en los próximos meses para culminar su apuesta por crear un Estado catalán --se ha comprometido a "dedicarse" a que el secesionismo supere el 50%--, pues la alernativa sería acabar "engullida por la maquinaria" del Estado.
Y ha indicado que, si hay un cambio de gobierno tras las elecciones generales del 20D, la Generalitat ofrecerá "diálogo y negociación tanto a Madrid como a Bruselas" si el nuevo Ejecutivo cambia la actitud actual de "beligerancia excepcional".
En todo caso, Mas ha adviertido al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, de que "juega con fuego" y de que "se acabará quemando", puesto que el Gobierno tiene deficiencias en la financiación que un día le pueden causar problemas ante la UE.