El diputado de la CUP en el Parlament, Albert Botran, ha reiterado este martes que la formación antisistema no ha cambiado su posición respecto al rechazo a apoyar la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat. Sin embargo, ha admitido que la negativa no es definitiva: si acuerdan con Junts pel Sí (JxSí) determinadas medidas sociales y cómo alcanzar una república, valorarían someter la propuesta al voto de sus bases, aunque esta incluyese a Mas como presidente.
"Corresponderá valorarlo en su momento", ha respondido en una rueda de prensa al ser preguntado sobre si la CUP llevaría a una asamblea abierta una propuesta con un 'qué', un 'cómo' y un 'cuándo' satisfactorios sobre la nueva legislatura, pero que implicara la reelección de Mas. Y ha reconocido que la negociación "madura adecuadamente".
Riesgo de ruptura de la CUP
En los últimos días, las diferencias internas en la CUP se han intensificado. Sectores liderados por la organización Endavant apuestan por mantener el veto a Mas, mientras que desde Poble Lliure (sucesor del MDT) se muestran receptivos con la posibilidad de apoyar a Mas para no poner en riesgo la hoja de ruta independentista. De hecho, el propio líder de CDC ha apelado este martes a la "responsabilidad" para insistir en que no piensa retirar su candidatura.
La formación antisistema está celebrando asambleas territoriales para debatir esta situación, que podría aclararse en la asamblea "nacional" prevista para el próximo domingo. En todo caso, la división en el seno de la CUP es cada vez más profunda hasta el punto de poner en riesgo la unidad del partido, una posibilidad que, en cambio, Botran ha rechazado de pleno.