Según el último informe de la OCDE sobre los sistemas de salud de los estados miembros, sólo Luxemburgo y tres países rescatados de Europa --Grecia, Irlanda y Portugal-- han reducido más que España su gasto sanitario desde que comenzó la crisis.
Y eso a pesar de que incorpora entre sus datos el dinero destinado a la sanidad privada, que ha mejorado sus cifras de forma significativa en los últimos años, con una inversión que asciende a 27.064 millones, un 2,8% más que en el 2009.
Las estructuras aún son caras
Sin embargo, los gobiernos autonómicos surgidos de las urnas el 24-M no han renunciado a sus costosas estructuras directivas, a pesar de que nuevas formaciones como Podemos y Ciudadanos hicieron bandera de ello. Incluso algunas como Aragón, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia, han ampliado el número de consejerías al separar sus competencias en Sanidad y Servicios Sociales. Asturias ha sumado una nueva dirección general.
Paradójicamente, los nuevos organigramas de la sanidad autonómica replican y multiplican por 17 el número de consejerías y viceconsejerías, subsecretarías, servicios de salud, direcciones generales, organismos públicos autónomos y fundaciones hasta levantar un complejo y burocrático sistema de salud que, en este aspecto, sí se puede considerar único en el mundo.
Más de 2.000 altos cargos
Los altos cargos, según datos de la consultora especializada Fillingthegap, suman más de 2.000 si se incluyen directores gerentes de hospitalarios. Y asesores, a veces amigos contratados a dedo.
Se trata de un verdadero ejército, de cuyo coste no informa el Ministerio de Hacienda y dan con cuentagotas los flamantes portales de la transparencia. A modo de ejemplo, las retribuciones de 25 altos cargos de las sanidad andaluza ascienden a 1,3 millones de euros. Más barato que el millón de euros con el que fueron retribuidos diez asesores contratados por el Ministerio de Sanidad, entonces capitaneado por Ana Mato, la madre de todos los recortes, entre los años 2012 y 2013. El sueldo más elevado correspondió a su director de comunicación, 69.316,70 euros.