Durante los últimos años, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que lideró la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha capitalizado el movimiento contra los desahucios por impago de hipotecas, que se multiplicaron al calor de la crisis y la explosión de la burbuja inmobiliaria. Pero hay otros grupos aparte de la PAH. Con postulados más radicales. Hasta el punto de que consideran que la cúpula de la PAH "trabajaba para la banca"
"Después de colaborar con ellos durante dos años, en 2013 llegue a convencerme de que la cúpula de la PAH, trabajaba para la banca". Así se ha expresado este viernes el abogado y activista antidesahucios José Ángel Gallegos, en un acto organizado por diversas entidades y plataformas antidesahucios en el Colegio de Periodistas de Barcelona.
Los bancos no serían acreedores válidos
En el acto, Gallegos y el presidente de la Asociación Hipotecados Activos, Josep Manuel Novoa, consideran que la práctica totalidad de las hipotecas firmadas durante el boom del ladrillo no pertenecen legalmente a los bancos, porque las vendieron a terceros en forma de bonos. Y, por tanto, al no ser los acreedores legales -estos serían la suma de los inversores que adquirieron los bonos- los bancos ya no pueden actuar como acreedores y exigir la ejecución de las hipotecas impagadas.
Desde este punto de vista, las entidades convocantes abominan de la estrategia de la PAH, que pasa por generalizar la dación en pago -saldar la hipoteca impagada devolviendo el inmueble al banco-. Consideran que es un error. Pero Gallegos va más lejos.
"Malicia" en la cúspide de la PAH
Gallegos afirma que la dación en pago "no es la vía para defender el derecho a la vivienda", porque significa "quitarle la casa a las personas". "Es un disparate, nunca debió ser la vía y creo que nunca lo fue". Afirma que "aunque digan que son asamblearios, la PAH tiene una cúpula, que es PAH Barcelona". Y explica que, aunque inicialmente pensó que la apuesta de la PAH por la dación en pago era "un error", finalmente se convenció de que se trataba de "malicia", y que esta misma "cúpula" de la entidad que dirigía Colau "trabajaba para la banca".
El abogado y activista aun personaliza más sus críticas, cargando directamente contra la ahora alcaldesa de Barcelona. "Cuando oyes a Colau llamando en el Parlamento 'criminal' a un banquero, lo suscribes. Pero una cosa son las palabras, y otra los actos", afirma. Y asegura que "Colau tiene un discurso muy fuerte" contra las entidades financieras, pero que "en sus actos está pidiendo que se entreguen las casas a la banca".
"Nuestros amigos los bancos"
"Queremos que les quitéis las casas a la gente y se las deis a nuestros amigos los bancos", ironiza, refiriéndose a la PAH. "Cuando hay movimientos que se oponen al sistema, una manera de desactivarlos es captarlos", añade aun. "Parece que defienden tus intereses pero en realidad no lo hacen", señala.
"Durante mucho tiempo se le ha hecho creer a la gente que lo mejor era entregar la casa al banco y mendigar para que no te exijan nada más", explica el activista, siguiendo con sus ataques a la PAH. "Es increíble que quedarse sin casa se vea como defender el derecho a la vivienda. Lo han hecho tan bien y han lavado el cerebro tan bien que la gente pensaba que defendían sus intereses", proclama. "Pedían al banco 'por favor quítame mi casa', y cuando lo conseguían gritaban: 'Sí, si se puede'".
Los indicios
Preguntado por este diario por si puede demostrar sus duras afirmaciones contra Colau y la PAH, el activista precisa que no tiene pruebas "como para abrir un procedimiento judicial", y que se basa fundamentalmente en "percepciones". Argumenta que dentro de la propia PAH "cada vez que se plantea otra opción que no sea entregar la casa", su núcleo dirigente "se cierra en banda y ataca al que lo propone".
Gallegos descarta que la PAH actúe de este modo simplemente porque prefiere adoptar una estrategia posibilista. Su argumento fundamental es que estos ataques a quienes rechazan la dación en pago son "sistemáticos", y surgen "desde el primer momento", de forma personal y "con mucha beligerancia".
Aunque las entidades convocantes del acto coinciden en rechazar la estrategia de la dación en pago de la PAH, las acusaciones contra Colau y la "cúpula" de la entidad de "trabajar para la banca" las ha lanzado Gallegos en solitario. Ni Novoa ni el moderador del acto, el periodista Josep Cabanyol, las han repetido o secundado. Aunque tampoco se han molestado en negarlas o matizarlas. Ni siquiera cuando, desde el público -con presencia destacada de activistas antidesahucios y afectados por la hipoteca-, se ha destacado la "inquietante noticia" de que Colau pueda ser "una infiltrada de la banca".