La alcaldesa de Barcelnoa, Ada Colau, llegó a la política después de haberse ganado una notable popularidad como portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Y a esta cuestión sigue dedicando una atención especial, ya como alcaldesa, con medidas que llegan a multar a las entidades financieras dueñas de pisos vacíos.
El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado un "primer paquete de medidas" en vivienda, con el objetivo de "parar los desahucucios" y "movilizar vivienda vacía, según ha informado este miércoles Colau en rueda de prensa. Unas medidas que pasan por aumentar las ayudas al alquiler -asumiendo la parte que le correspondería a la Generalitat y que esta no paga, según ha erclacadop el consistorio-, y también por multas.
Multas a tres entidades
El consistorio ha impuesto 12 sanciones de 5.000 euros a entidades financieras por tener durante más de dos años viviendas vacías, según ha anunciado Colau. La alcaldesa ha señalado que prioriza la vía del diálogo con las entidades propietarias de pisos vacíos. Pero que, el Ayuntamiento utilizará "todos sus mecanismos para movilizar" pisos vacíos, incluidas las sanciones.
Las entidades multadas deberán pagar los 5.000 euros y poner en el mercado los pisos vacíos en el plazo de un mes y, si no lo hacen, se les interpondrá una sanción de 10.000 euros, que ascenderá a al siguiente mes a 15.000 euros. Estas sanciones se aprobaron durante el mandatro del exalcalde convergente Xavier Trias. Siete de las 12 multas se han impuesto a la Sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria (Sareb); cuatro al BBVA y una al Banc Sabadell.
Quiere comprar 17 pisos por 3,5 millones
Además, el Ayuntamiento destinará 3,5 millones de euros a la compra y rehabilitación de vivienda, y ha comunicado a la Generalitat su voluntad de ejercer el derecho de tanteo y retracto sobre 17 viviendas para destinarlas a alquiler social, siete de las cuales previsiblemente pasarán a ser propiedad municipal en un mes. Estas viviendas serán compradas y rehabilitadas por un máximo de 80.000 euros cada una.
Por cada uno de los siete pisos -tres de los cuales están en Nou Barris, dos en Sant Andreu, uno en Sants-Montjuïc y otro en Horta-Guinardó-, el Ayuntamiento ha emplazado a la Generalitat a que adquiera otro. Y ha añadido que, si no tiene fondos para hacerlo, los incorpore a "la deuda del Govern con la ciudad".