El Tribunal Supremo ha archivado la querella contra Fernando López Aguilar por violencia de género por considerar que se sustentaba en unos supuestos contradictorios y en hechos que carecen de relevancia.
Hace tres meses, el Supremo negó a admitir a trámite la causa debido a su inconsistencia. La insistencia de la juez instructora le hizo admitirla finalmente.
El alto tribunal, que se pronuncia porque el ex ministro era aforado en el momento de la acusación, dice en lenguaje jurídico que la causa nunca debería haber llegado hasta sus despachos, dado que es inconsistente, reitera. Es una forma de tirar de las orejas a quienes han permitido que el sumario prospere.
Remitido desde Las Palmas
“Más allá de la falta de precisión en la descripción de esos hechos, algunos incluso sin relevancia penal, lo cierto es que ninguno de ellos tiene la virtualidad inculpatoria que se le atribuye”, dice el fallo en relación al relato de lo acontecido construido por la jueza de Violencia sobre la Mujer de Las Palmas.
El tribunal señala también que la credibilidad del testimonio de Natalia de la Nuez, la ex pareja del eurodiputado socialista, debe ser contemplada “con suma cautela”. Y subraya que, en función de la fecha y del funcionario ante el que ella prestó testimonio, la denunciante se pronuncia “con la misma naturalidad graves imputaciones y encendidos elogios a la persona a la que se está denunciando”.
El testimonio “zigzagueante” genera dudas sobre en qué momento de su declaración se “ajustó a la verdad”, y en consecuencia archiva la causa.
Cuando trascendió la denuncia, el PSOE suspendió de militancia al eurodiputado y lo separó de su Grupo Parlamentario en Estrasburgo.