El Ejecutivo autonómico de Artur Mas ha decidido ignorar -al menos, retóricamente- la suspensión por parte del Tribunal Constitucional (TC) de la normativa que pretendía desarrollar algunas de las nuevas "estructuras de Estado" que contempla el proyecto secesionista. Así lo ha proclamado este martes, por boca de la vicepresidenta y portavoz del Gobierno autonómico, Neus Munté, que ha asegurado que no van a dar "ni un paso atrás".
En rueda de prensa tras la reunión del Consejo Ejecutivo, Munté ha explicado que las denominadas "estructuras de Estado" que debía impulsarse por las leyes ahora suspendidas por el TC están ya "muy avanzadas" y con "el rumbo fijado". Añadiendo que la Generalidad va a seguir adelante con sus planes al respecto.
"No prevemos ningún cambio de ellas ni en los trabajos que pensábamos realizar", ha asegurado Munté, que ha asegurado que el Gobierno autonómico "continuará buscando soluciones y salidas a los escollos que pone el Estado".
Los preceptos suspendidos
El TC suspendió ayer lunes, entre otros, los preceptos que pretendían desarrollar la denominada "hacienda propia", la 'seguridad social' catalana, y el inventario de activos y pasivos para una eventual separación. Y a la "hacienda propia" y al proyecto de seguridad social se ha referido concretamente Munté, señalando que son iniciativas que están especialmente avanzadas.
"Cuando estas convencido de que actúas de forma legal, no hay espacio para hablar de desobediencia", ha añadido aun Munté, eludiendo así precisar si el Ejecutivo autonómico se planteaba desacatar la decisión del TC.