"El proyecto político de la federación de CiU se ha acabado". Así lo ha anunciado este jueves el coordinador general de CDC, Josep Rull, en una rueda de prensa convocada para explicar las decisiones adoptadas este miércoles por la noche en el Comité Ejecutivo del partido.

Rull también ha confirmado que la ruptura de la federación nacionalista supone que CDC no se presentará junto a UDC en las elecciones autonómicas anunciadas para el 27 de septiembre. Una posición que había avanzado el propio presidente de la Generalidad y líder de CDC, Artur Mas, horas antes.

Una semana de tensión creciente

La secesión de CiU se produce tras varios días en que CDC y UDC se han lanzado todo tipo de agrias acusaciones cruzadas. El domingo, UDC celebró una consulta entre sus militantes en la que resultó vencedora la opción que rechazaba una declaración unilateral de independencia así como cualquier actuación ilegal o que dejase a Cataluña fuera de la Unión Europea (UE), lo que, en la práctica, suponía rechazar la hoja de ruta secesionista pactada por CDC, ERC, la ANC, Òmnium Cultural y la AMI.

CDC respondió el lunes lanzando un ultimátum a sus socios: si querían mantener la coalición de CiU de cara al 27S, los democristianos debían de asumir que se trata de un plebiscito sobre la secesión de Cataluña y defender la independencia de Cataluña sin condiciones. Y debían dar una respuesta inmediata.

UDC lo hizo este jueves, anunciando que abandonaba el Gobierno autonómico (retirando los tres consejeros que tiene) pero ofreciendo estabilidad parlamentaria durante el resto de legislatura, evitando pronunciarse sobre el 27S y subrayando que su intención no era romper CiU.

Finalmente, ha sido CDC la que ha dado el paso definitivo y ha roto formalmente la coalición, tras 37 años de vida.

"Es un camino sin retorno"

Rull, que ha comparecido acompañado de la portavoz del partido, Carme Conesa, ha asegurado que la ruptura "es un camino sin retorno", descartando una supuesta hibernacion de la federación nacionalista hasta después del 27S.

CDC cree que de esta forma se clarifican los proyectos ante los ciudadanos de cara a las autonómicas porque los ya ex socios de CiU "defenderán posiciones diferentes".

"Separación amistosa y sin dramatismos"

El coordinador general de CDC ha insistido en que su partido pretende que "la separación sea amistosa" y "sin dramatismos", para lo que abrirán "un proceso" de divorcio "ordenado".

En ese proceso habrá que determinar cómo se separan los grupos en el Congreso, el Senado y el Parlamento autonómico, y cómo queda el reparto de poder provincial, comarcal y municipla.

"Este instrumento [de CiU] ya no tiene sentido"

Rull ha subrayado que CiU "ha sido una herramienta útil" durante las casi cuatro décadas que ha durado, pero ha insistido en que ahora CDC quiere conseguir la independencia de Cataluña, por lo que "este instrumento ya no tiene sentido", aunque no ha descartado colaborar en el futuro.

"CDC inicia una nueva etapa apasionante, trepidante. Nuestro compromiso con la libertad de este pueblo es muy serio y trascendente. Y lo conseguiremos, porque siendo independientes podemos garantizar mucho mejor el bienestar de la gente", ha añadido. "Tenemos un plan, que es ganar las elecciones del 27S y poder ser independientes", ha concluido.