Luis Barcenas se ha mostrado muy suelto este lunes en su comparecencia en el Parlamento autonómico. El ex tesorero del PP, y principal imputado en el caso de la presunta contabilidad paralela del partido, y también implicado en el 'caso Gürtel', ha rechazado en un primer momento declarar. Pero posteriormente ha respondido a preguntas de los diputados autonómicos. Y lo ha hecho tirando de ironía en numerosas ocasiones.

Bárcenas, que ha comparecido este lunes -por vidoconferencia- ante la 'Comisión de investigación sobre el fraude y la evasión fiscales y las prácticas de corrupción' del Parlamento autonómico -más conocida popularmente como comisión Pujol o comisión del fraude-, se ha negado en principio a hacer "ningçun tipo de declaración", acogiéndose a su derecho a la defensa y recordando que hay "un proceso judicial abierto contra él". Pero ha cambiado de opinión al momento y sí ha respondido a algunas preguntas.

El ex tesorero del PP ha rechazado las acusaciones de corrupción, argumentando que él está imputado por fraude fiscal, y que, sobre delitos relacionados con la corrupción política "poco tengo que aportar, desde mi experiencia". También está imputado por presunta evasión de capitales, y la Audiencia Nacional cree que ocultaba cantidades millonarias en cuentas en Suiza. Pero sobre este punto no se ha dado por aludido.

"Lo quieran creer o no"

"En general no soy experto sobre paraísos fiscales. Soy experto en algunas cosas, pero sobre esto no tengo ninguna experiencia", ha espetado Bárcenas a los diputados autonómicos. "Los ingresos que yo he tenido no guardan ninguna relación con la corrupción política; son fruto de mis ingresos profesionales, lo quieran creer o no", ha afirmado también.

Igualmente ha sido irónico en relación al célebre SMS que, según se publicó en su momento, le envió supuestamente el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, cuando estalló el escándalo, con el texto "Luis, sé fuerte". "El SMS responde a un momento puntual y se es fuerte siempre, con SMS y sin SMS", ha dicho Bárcenas.