Cáritas Barcelona ha presentado este jueves un informe en el que ha alertado de que cada vez existen más familias en situación de pobreza y que "la desigualdad económica no para de crecer".
Los responsables de la entidad han explicado que el año pasado tuvieron que atender alrededor de unas 173.000 personas, un 7% más en que en 2013 y que esta es una tendencia que no se corrige.
El cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, ha sido el encargado de presentar el informe anual de Cáritas Diocesana de Barcelona, que el año pasado atendió a 173.446 personas, un 7% más que en el 2013.
La pobreza, cada vez más "crónica"
Sistach ha denunciado que la pobreza en Cataluña "es cada vez más crónica, más extensa, más intensa, más profunda y más autóctona" y ha expresado su preocupación por la situación de los niños, ya que una de cada tres personas atendidas por Cáritas son menores de edad.
El arzobispo ha valorado la situación como de "muy preocupante", y ha señalado la importancia de que la sociedad se sensibilice frente a estos datos, que cada vez implican a más españoles y no a tantos inmigrantes. Es decir, casi la mitad de las personas atendidas había nacido en España -porcentaje que no se daba desde el año 1999-, la misma proporción de familias con hijos que han tenido que pedir ayuda.
Asimismo, el director de Cáritas, Salvador Busquets, ha detallado que el 25% de esas familias que han participado en proyectos de Cáritas han necesitado ayudas básicas para cubrir gastos de vivienda y alimentos, y que en el 33% de los casos se trataba de madres solas con niños.
Por otra parte, el 39% de los individuos atendidos no disponían de un hogar y residían en habitaciones de realquiler, o en casas de amigos o parientes.
Pobreza energética
Otra gran protagonista en las necesidades familiares es la pobreza energética, ha recordado Busquets, que ha informado de que se han llegado a sextuplicar las ayudas para paliar los gastos relativos a esta área.
Sistach ha enfatizado datos como el del número de comidas que se están facilitando cada mes a 1.362 adultos y niños, 33.556; el número de personas que ha tenido que recibir atención psicológica a causa de la presión de la crisis, 631; y el número de desahucios que se han evitado durante el 2014 por medio de ayudas económicas o mediación, 199.
Durante el año pasado tuvieron que ofrecer un 3% más de servicios que en 2013, y un 64% más si se compara con el año 2009.
El cardenal ha asegurado también que, aunque el número y perfil de personas atendidas en estos primeros meses de 2015 son similares al primer periodo del año anterior, la gente es "cada vez más pobre y tiene más necesidades”. Según el último estudio FOESSA, solo el 33 % de la población de Cataluña está totalmente integrada en la sociedad, mientras que el número de personas excluidas ha pasado a ser del 16% en 2007 al 25% del total.
Estas cifras coinciden con el porcentaje de ciudadanos que vivía en situación de pobreza severa -ingresos inferiores al 40 % de la renta media- durante el 2013, un 9,1%; un 2 % más que en 2008.
Actualmente, Cáritas Diocesana de Barcelona gestiona 24,6 millones de euros, procedentes en un 85% de fuentes privadas, y más de 2.100 voluntarios para ayudar a una sociedad que, critican, cada vez recibe menos ayudas económicas.