La escritora estadounidense Liz Castro, la más votada en las elecciones para constituir la nueva dirección de la ANC

La escritora, traductora y editora estadounidense Liz Castro, con 5.093 votos, ha sido la candidata más votada en las elecciones internas celebradas este sábado por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) para elegir al nuevo Secretariado Nacional.

Según los resultados provisionales de las votaciones -en las que han participado 7.625 de los 34.5000 que la entidad secesionista dice tener-, tras Castro se han situado Rosa Alentorn Sànchez -4.973- (responsable de la recogida de firmas en defensa de la independencia), Agustí Alcoberro Pericay -4.864- (ex director del Museo de Historia de Cataluña), Jordi Sànchez Picanyol -4.640- y Gemma Cots -4.087-.

La nueva dirección de la entidad la forman 75 personas (50 pertenencen a las agrupaciones locales). De ellas saldrá el sustituto de Carme Forcadell como presidente de la ANC, en una votación que realizarán los propios miembros del Secretariado Nacional el próximo sábado 16 de mayo. Ese día también se nombrará al vicepresidente, al tesorero y al secretario.

La entidad, más dividida que nunca

Lejos de resolver las luchas intestinas por conseguir el poder que han desangrado a la entidad en los últimos meses, estos resultados dejan abierta la herida de la división.

Sànchez -adjunto al Síndic de Greuges de la Generalidad y con una larga trayectoria en el mundo del independentismo radical- era la persona que en las últimas semanas aparecía como el candidato de consenso para superar la crisis interna. Sin embargo, la clara victoria de Castro la sitúa como un nuevo obstáculo para la aspiraciones del ex dirigente de La Crida.

Cabe recordar que, hasta ahora, Forcadell siempre había sido la más votada tanto en las elecciones para conformar el secretariado como en la posterior votación para la Presidencia de la ANC.

Repite el inefable Víctor Cucurull

Castro (California, 1965), que vive a medio caballo entre EEUU y España, es bisnieta de andaluces emigrantes. Según confesó en una entrevista en el diario Ara, empezó a asumir como propio el nacionalismo catalán en 1986, al asistir "por casualidad" a la polémica Universidad Catalana de Verano, en Prades (Francia). Posteriormente vivió en Barcelona. "Una de las cosas que yo sentía cuando estaba allí es que aquello no era España, que España era otro país", explicó.

En la nueva dirección de la entidad repite el inefable Víctor Cucurull (del también incalificable Institut Nova Història), mientras que, entre otros, se estrenan Carme Garcia Suàrez, ex diputada de ICV en el Congreso, y Gabrial Rufián Romero, miembro de Súmate.