Esta mañana se ha vuelto a evidenciar la división que sufren las fuerzas soberanistas desde la celebración del denominado "proceso participativo" del pasado 9 de noviembre.
En un debate en Catalunya Ràdio donde han participado el portavoz de CiU en el Parlamento autonómico, Jordi Turull; el diputado de ERC Joan Tardà; el secretario general de ICV, Joan Herrera, y el diputado autonómico de la CUP Quim Arrufat, han reconocido que el plan secesionista se ha debilitado y que la unidad se ha resquebrajado. Una situación que atribuyen a la decisión de haber abandonado el denominado 'derecho a decidir' para abrazar directamente la secesión de Cataluña de cara a las elecciones autonómicas del 27 de septiembre.
Herrera niega que el 27S sea un plebiscito
La primera discrepancia ha llegado cuando Herrra ha rechazado que el 27S pueda ser considerado un plebiscito sobre la secesión, al decir que "si fuera para decidir la relación con el Estado, sería necesario que una persona fuera un voto", y no simplemente una mayoría en diputados.
El dirigente ecosocialista se ha mostrado escéptico con que la comunidad internacional acepte los resultados de las elecciones y que el plan secesionista "salga adelante en el contexto europeo" ya que "hace falta una correlación de fuerzas potente".
Turull considera "inaudito" que no haya acuerdo
Turull, por su parte, ha hecho una alusión indirecta a UDC e ICV cuando ha afirmado que "ahora que solo dependemos de nosotros" es "inaudito" que no haya acuerdo. El dirigente nacionalista ha reprochado la falta de unidad y lo ha comparado con la comparecencia conjunta en Madrid para reclamar un referéndum para la secesión de Cataluña, donde sí se alcanzó un pacto.
Por alusiones, Herrera le ha contestado que en ese momento se defendió ante el Congreso de Diputados una "mayoritaria absoluta", consistente en el 'derecho a decidir', y no por la secesión unilateral de Cataluña. Asimismo ha criticado el "bloqueo" del Congreso a las aspiraciones de Cataluña de llevar adelante una consulta.
Solo coinciden en que C's debilita el plan secesionista
En lo único que han coincidido los representantes de las cuatro formaciones soberanistas es en que el auge de Ciudadanos (C's) perjudica el denominado "proceso" independentista. El diputado por ERC Joan Tardà ha alertado de que detrás del partido liderado por Albert Rivera están los poderes económicos y mediáticos: "La oligarquía española alimenta a Ciudadanos, alimenta todo lo que puede suponer un debilitamiento del proceso".
Herrera ha continuado con la reflexión de Tardà añadiendo que el "proceso constituyente" que ellos defienden ayudará a cambiar el panorama político catalán y ha instado a "derrotar a CiU". Una declaración que Turull ha calificado de "absurda" y se ha vuelto a ver la división entre las fuerzas soberanistas, con acusaciones y reproches mutuos, en relación a la renta garantizada de ciudadanía o la segregación del Instituto Catalán de la Salud. Mientras el líder de ICV se ha mostrado partidario de que el 27S también se vota sobre temas sociales y económicos, Turull ha intentado subrayar que únicamente con "migajas" no se puede gobernar y que la secesión podrá garantizar los "recursos suficientes".
Sin entente
El diputado autonómico de la CUP Quim Arrufat, que ha intervenido por teléfono, ha suscrito las afirmaciones de Tardà en cuanto al proceso constituyente, pero ha lamentado que "no todo el mundo ha superado la lógica autonomista, del régimen del 78", en referencia a ICV. Arrufat se ha mostrado "perplejo" por el "giro en el discurso" desde entonces.
El debate ha finalizado sin llegar a ningún entente sobre qué lectura debe tener las elecciones autonómicas del 27S y todo apunta a que no habrá ningún acto conjunto de las fuerzas soberanistas.