El PP ganará las elecciones del próximo 24 de mayo a la Comunidad y al Ayuntamiento de Madrid pero para retener ambos gobiernos deberá conseguir el apoyo de Ciudadanos, que irrumpe con fuerza y se sitúa como cuarto partido más votado.
Al menos, eso es lo que apunta una encuesta de Sigma Dos publicada este domingo por El Mundo, que dejan el futuro de Cristina Cifuentes (en la Comunidad) y de Esperanza Aguirre (en el Ayuntamiento) en manos de Ignacio Aguado y Begoña Villacís, respectivamente.
Podemos pisa los talones al PSOE en la Comunidad
Según este sondeo, en caso de celebrarse ahora elecciones, el PP obtendría entre 44 y 45 diputados autonómicos (32,8% de los votos) en la Asamblea de Madrid, lejos de los 72 que tiene actualmente, y también lejos de los 65 en los que se sitúa la mayoría absoluta.
En segundo lugar se situaría el PSOE, con 28 escaños (20,7%), ocho menos que los 36 actuales. A continuación, entraría Podemos, con 25 ó 26 asientos (19,2%).
Tras ellos, Ciudadanos obtendría 22 ó 23 diputados autonómicos (16,6%). Mientras que IU se quedaría con 8 ó 9 escaños (6,5%), cuando ahora tiene 13. El sondeo deja a UPyD sin representación, al no pasar el corte del 5% de los votos (ahora tiene 8 asientos).
De confirmarse estos resultados, sería imposible pactar un tripartito de izquierdas. Si bien, que la balanza bascule hacia un lado u otro depende únicamente de dos o tres escaños.
El PSOE caería a tercera fuerza en el Ayuntamiento
En el caso del Ayuntamiento de Madrid, el sondeo apunta datos muy parecidos. El PP ganaría las elecciones con entre 20 y 22 concejales (34,5% de los votos), lo que le dejaría lejos de los 31 actuales y de los 29 en los que se sitúa la mayoría absoluta.
En segundo lugar entraría la coalición Ahora Madrid (formada por Podemos, Equo y ex miembros de IU) con 12 ó 13 ediles (21,2%). Y tras ellos, el PSOE, con 11 asientos (18,7%).
Ciudadanos obtendría 9 concejales (15,1%) y tendría la llave para formar gobierno municipal, puesto que IU solo conseguiría 3 ó 4 asientos (frente a los 6 actuales), lo que sería insuficiente para formar un tripartito de izquierdas, aunque también por muy poco.