ICV, uno de los partidos del bloque del denominado "derecho a decidir", y que defendió sin fisuras la celebración de un referéndum independentista, no quiere saber nada, en cambio, de las últimas "hojas de ruta" secesionistas que encabezan CDC y ERC. Si ya no intervino en el "principio de acuerdo" de hace tres semanas, tampoco lo ha ha hecho en el "preacuerdo" presentado este lunes. Un acuerdo, además, que ha rechazado explícitamente.
La colíder ecosocialista Dolors Camats, en rueda de prensa en el Parlamento autonómico, ha dejado muy claro que ICV no se sumará al acuerdo, que, aunque fue firmado por CDC, ERC, y las asociaciones independentistas ANC, Òmnium y AMI, considera "bilateral" entre CDC y ERC.
La nueva hoja de ruta, de hecho, y a diferencia de otras iniciativas anteriores de las fuerzas soberanistas, ahora solo incluye a independentistas. Algo ha lo que ha aludido tácitamente Camats cuando ha lamentado que CDC y ERC hayan "empequeñecido el proceso".
Diluye las esperanzas de Forcadell y Casals
Así, Camats ha explicado que, si el objetivo de los firmantes era que otras fuerzas se sumaran a su acuerdo -como afirmaron 12 horas después del pacto las líderes de la ANC, Carme Forcadell, y de Òmnium, Muriel Casals, que confiaban en la incorporación de ICV-, el documento "está hecho de la peor manera posible".
Hecha esta crítica a la totalidad a la nueva "hoja de ruta", Camats ha dejado una puerta entreabierta a llegar a acuerdos concretos en puntos programáticos con otras fuerzas soberanistas. Pero en ningún caso "a partir del acuerdo entre CDC y ERC", ha precisado Camats.