El fiscal de Marsella Brice Robin, que se encarga de la investigación del accidente del avión de Germanwings que se estrelló este martes en los Alpes franceses, ha revelado este jueves que el copiloto estrelló el aparato deliberadamente, causando la muerte de las 150 personas que viajaban a bordo.
Tras escuchar la grabación de la cabina registrada en la caja negra recuperada, el fiscal ha asegurado durante una rueda de prensa que el accidente fue el resultado de "una acción voluntaria por parte del copiloto", Andreas Lubitz, alemán de 28 años.
El copiloto no dejó entrar al comandante a la cabina
El fiscal ha explicado que durante los minutos previos al inicio del descenso del avión, la conversación entre el comandante y el copiloto fue "normal". Luego el comandante le pidió al copiloto que tomara los mandos del avión, y se oye la puerta que se cierra, de lo que se deduce que el comandante abandona la cabina.
Entonces, cuando el copiloto está solo, "manipula" los mandos para hacer descender el avión, algo que "solo se puede hacer voluntariamente". A continuación se oye al comandante pedir al copiloto que le deje entrar en la cabina. Pero "no hay ninguna respuesta" por parte de este.
Hubo "voluntad de destruir el avión"
"Se oye un ruido de respiración humana dentro de la cabina hasta el impacto final. Esto quiere decir que, a priori, el copiloto estaba vivo. Se oyen después los contactos de la torre de control Marsella en diferentes ocasiones pero no hay ninguna respuesta por parte del copiloto. [...] La torre incluso pidió a otros aviones que contactaran con el avión, pero no tuvieron ninguna respuesta. [...] Las alarmas de la proximidad de tierra se activaron. Se oyen golpes violentos para poder echar abajo la puerta, que está blindada para protegerse de acciones terroristas", ha señalado Robin.
Y ha concluido: "La interpretación más plausible que hacemos los investigadores es que el copiloto de forma voluntaria se ha negado a abrir la puerta de la cabina al comandante, que estaba fuera, y ha accionado el botón para hacer perder altura al avión por una razón que actualmente ignoramos completamente pero que se puede analizar como una voluntad de destruir este avión".
Descarta que haya sido "un atentado terrorista"
El fiscal ha indicado que ya han solicitado "información" a las autoridades alemanas sobre "el entorno personal, familiar y profesional" del copiloto. En todo caso ha descartado calificar la acción del copiloto de "suicidio" ("porque, cuando uno se suicida, se suicida solo") y ha insistido en que no se nota la respiración de alguien que estuviera teniendo un infarto (la respiración es "normal", ha reiterado), aunque no ha pronunciado "ninguna palabra durante los diez últimos minutos".
Por otra parte, Robin ha señalado que se desconoce el "origen étnico" del copiloto, pero "no hay ningún elemento que pueda hablar en favor de un atentado terrorista".
También ha detallado que "los gritos solo se oyen en los momentos antes del impacto, en el último momento", por lo que ha deducido que los pasajeros solo se enteraron de que el avión iba a estrellarse segundos antes del accidente, y ha subrayado que "la muerte ha sido instantánea".