Baja de significación en ICV. Por el sector secesionista. Y debido a la ambigüedad de la dirección en cuanto al independentismo. El ex eurodiputado Raül Romeva ha anunciado este lunes que abandona el partido, porque "no comparte" el modelo territorial aprobado por la Convención Nacional ecosocialista este fin de semana.
En una entrada en su blog personal -la "más difícil que he escrito nunca", exclama- el ex eurodiputado explica que, en la Convención Nacional de ICV "se ha tomado una decisión que respeto profundamente, pero que, tal como se he argumentado en numerosas ocasiones, no comparto", aludiendo al documento en el que se defiende un "Estado catalán libre y soberano", pero dentro de España.
En su texto, Romeva, abiertamente independentista desde hace años, recuerda sus tesis al respecto, para justificar su renuncia. "Hace tiempo que he llegado a la conclusión de que si queremos salir del callejón sin salida político, social, económico y ecológico en el que nos encontramos desde hace tiempo, necesitamos Estados nuevos [...] y entre estos Estados tiene todo el sentido del mundo que Cataluña sea uno más", razona.
No cree "posible" el modelo que propone ICV
El ex dirigente ecosocialista añade que no cree "posible" y ni siquiera "deseable a estas alturas" una "Cataluña soberana" dentro de una "España plurinacional". "Se ha intentado. Lo hemos intentado. Mucho. Quizá demasiado. Y no lo hemos conseguido", explica. Y deja claro que no puede "involucrarse" en un proyecto en el que no cree.
"La Convención de ICV ha puesto rumbo hacia una Cataluña dentro de España. Mi compás náutico hace tiempo que marca otro", explica Romeva, que considera como "lo más coherente y honesto" poner fin a su militancia en ICV.
El posicionamiento de ICV respecto al desafío secesionista es particularmente ambiguo. La formación, que no pidió el voto en ningún sentido en la pseudoconsulta secesionista del 9N, ha aprobado ahora un complejo modelo que mantiene a Cataluña dentro de España, pero con atribuciones exclusivas y blindadas. A la vez, y manteniendo esta misma ambigüedad, ha amenazado con pasarse al independentismo explícito si este proyecto fracasa por obra del Gobierno.