Política

El romance del político del PP y la ex de Óscar Jaenada

Borja Sémper y la actriz Bárbara Goenaga salen juntos desde hace cuatro meses. La ex de Bono publica el manual de la perfecta divorciada y muestra las virtudes del jaguar. Podemos y Jordi Júnior: dinero viajado

28 febrero, 2015 13:59

La crónica social digna de tal nombre se ciñe a la gala de los oscars de Hollywood, decadente y obsoleta marcianada cuyo glamúr es el mismo que el de una entrega de premios a los trabajadores del mes en Corberó. Siempre igual, una reiteración indigerible de modelos absurdos y trajes insustanciales, bromas de pega y la constatación del que cine no es ni un arte, ni una industria ni nada que vaya mucho más allá de un desfile de Victoria Secret's, renovación del género de las ferias de ganado.

Cuando la gente se exhibe sin pudor en el twitter, las peripecias de Raquel Mosquera (viuda de Pedro Carrasco) son material de papelera o la portada del Semana. En Pronto, la musa es Bárbara Rey y en todo el papel satinado triunfa la exnovia de Cristiano Ronaldo, Irina Shayk. Lo más sustantivo es el romance del político Borja Sémper y la actriz Bárbara Goenaga, que ha pasado de estar con Óscar Jaenada a comprometerse con el líder de los populares en "Donosti". Cuatro meses de romance son los que lleva la feliz pareja. Sémper ya estuvo casado. Aportan un niño cada uno a su nueva relación.

Quien también estuvo casado es José Bono, a quien su exmujer, Ana Rodríguez, le ha hecho un descosido del quince con la publicación de un libro, según explica Beatriz Cortázar en el Abc: "«Toda mujer debe tener al menos tres maridos», decía Zsa Zsa Gabor cuando ya iba por el noveno. Su caso no es único, pero sí se salta la media de las estadísticas sobre el divorcio y sólo por eso merecería un monumento: por ser la famosa que más cree en el matrimonio (y menos dura). Como dice la juez Purificación Puyol, «un ex es para toda la vida», y en su libro «El divorcio elegante» aconseja que cuando alguien se va a casar no debe pensar en la otra persona como en el amor de su vida, sino en cómo será cuando rompan el matrimonio".

Y continúa la crónica: "Ana Rodríguez, exmujer del socialista José Bono, aborda la política y las rupturas en «El club de las perfectas divorciadas», un libro con el que debuta como escritora y que saldrá a la venta el próximo mes de mayo. De su experiencia, y de lo que aconseja en estas páginas, habló durante su estancia en Andorra para probar el nuevo agarre AWD del Jaguar XF y XJ. «Me paso la vida al volante. Tengo que visitar las tiendas de Tous que llevo y siempre estoy en el coche», comenta divertida. No en vano, Ana gestiona siete franquicias de la firma de joyas que tiene repartidas por Castilla-La Mancha y que ha conseguido mantener a pesar de la crisis. No ha cerrado ninguna, pero sí ha tenido que reducir personal. Lo que comenzó como un libro de una mujer de 50 años «se convirtió en el de la ‘‘perfecta divorciada’’, porque así lo quiso la editorial tras leer el capítulo en el que hablaba de mi ruptura», cuenta".

El agarre AWD debe ser como en su tiempo la tracción integral del Michucichi Supertrombo, un colofón de automóvil para la perfecta descasada, porque nada es para siempre, que diría Borja, salvo el ronroneo de tu jaguar. Jordi Júnior piense tal vez que el tal auto es una "merda", pero para el común es un "haiga", un torpedo británico y algo al alcance de muy pocos, entre ellos cuatro de la ejecutiva de Podemos.

Las rentas y patrimonios de los izquierdistas bolivarianos muestran que la crisis no ha sido igual para todos, obviedad que incluye a quienes han hecho de la demagogia la manivela del cajero de facturar. En eso, el hijo mayor de Pujol y Juan Carlos Monedero se parecen. El primero como dinamizador económico y el segundo como agitador, también económico. Dinero viajado.

En La Vanguardia, Cristina Jolonch, escribe sobre el chef de moda y su novia, David Muñoz y Cristina Pedroche. De un primer vistazo parece que les encanta salir a comer. Pero no. Lo que les gusta es salir a correr, nefasto ejercicio para las articulaciones y la estabilidad general de los órganos internos. Es tendencia todo lo contrario, una tabla de posiciones cuya particularidad es la quietud. Consiste en permanecer sentado delante de la televisión y ya hay hasta campeonatos. No es fácil, porque el atleta no puede ingerir sólidos salvo que se levante a por ellos.