El alcalde de Barcelona, el convergente Xavier Trias, se ha posicionado este lunes en contra de la posible privatización -concesión por 30 o 40 años, técnicamente- de la explotación de la línea 9 del metro de Barcelona como opción para finalizar unas obras detenidas sine die por falta de financiación, una posibilidad que, según ha informado también este lunes El Periódico, estaría barajando la Generalidad.
En declaraciones a los medios tras visitar el salón de empleo juvenil JOBarcelona, Trias se ha mostrado en contra de esta posible privatización, porque considera que supondría una competencia a la pública Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que gestiona el suburbano barcelonés. De hecho, buena parte de las estaciones de la futura nueva linea de circunvalación -que unirá el aeropuerto con el centro de la ciudad, y que debería inaugurarse en parte el año que viene- ya serán gestionadas por las empresas constructoras.
'Método alemán'
La construcción de la L9, además, se financió -en época del tripartito- con el denominado 'método alemán', por el que la Generalidad pagará un canon en los próximos años a las constructoras, que adelantaron los fondos. Este método supone un importante sobrecoste de la infraestructura, a cambio de aplazar en el tiempo su pago.
Trias, además, ha lamentado la "filtración" de este proyecto de la Generalidad, y se ha quejado de ella ante el consejero competente, el titular de Territorio y Sostenibilidad, el también convergente Santi Vila. "No me parece serio que el alcalde de Barcelona vea este anuncio en los medios cuando no estamos de acuerdo, y él lo sabe, pero me dice que él no lo ha filtrado", ha explicado Trias.
El alcalde barcelonés también ha considerado una "irresponsabilidad" la filtración. "Quién haya filtrado este informe no tiene claro quien manda en el Área Metropolitana", ha proclamado.