Un informe de la Agencia Tributaria, basado en otro previo de la Guardia Civil, sostiene que la empresa de un ex socio de Jordi Pujol Ferrusola, hijo mayor del ex presidente de la Generalidad Jordi Pujol e imputado -como sus padres y cinco de sus seis hermanos- por presuntos delitos económicos, financió irregularmente a CiU a cambio de concesiones en el Ayuntamiento de Lloret de Mar (Gerona), entre los años 2008 y 2001, según informa El País.
Según esta información, el informe afirma que GBI Serveis, propiedad de Gustavo Bueno, ex socio de Pujol Ferrusola, aportó al menos 550.000 euros en donaciones a las tres fundaciones vinculadas a CDC y UDC entre los años 2007 y 2010, además de realizar préstamos nunca devueltos a la federación nacionalista.
A la vez, GBI Serveis obtuvo millonarias y sospechosas concesiones por parte del ayuntamiento de Lloret de Mar. Así, según esta misma información, en 2008 ganó el contrato para un centro de residuos en la población, sin experiencia alguna en el sector, frente a una empresa con experiencia acreditada y que presentó una oferta más barata.
El imputado Crespo era el alcalde
Posteriormente, en 2011, la misma empresa obtuvo un contrato para la recogida de basuras en la población, en un concurso que, según el informe, se redactó "acorde con las conveniencias" de GBI Serveis. Además, la concesión del servicio se otorgó por 10 años, cuando la ley limita estos contratos a un máximo de cuatro, prorrogables a dos más.
Se da la circunstancia de que durante esos años gobernó en la población el convergente Xavier Crespo, imputado por los delitos de cohecho y prevaricación, por unos hechos diferentes, presuntamente cometidos entre los años 2007 y 2010.
Crespo, además, ya estuvo implicado en otro escándalo, en relación a unos posibles sobresueldos irregulares en la empresa pública Centros Médicos Selva Maresme y la Corporación de Salud del Maresme y la Selva, que se destapó a mediados de 2012.