El juez y activista independentista Santiago Vidal ha avanzado este martes algunos rasgos del borrador de propuesta de constitución para una hipotética Cataluña independiente que ha elaborado un grupo de juristas liderados por él mismo, y que presentará este sábado. Un avance en el cual destacan dos puntos muy concretos, que son fuente recurrente de polémica dentro del propio entorno secesionista: la cuestión del ejército y el estatus de la lengua española.
Y el texto se moja en estos dos puntos. Según ha explicado el propio Vidal este martes, en rueda de prensa en Gerona, su borrador de constitución establece que la hipotética República catalana independiente no tendrá ejército -como defiende también el presidente de la Generalidad, Artur Mas-, y que el castellano será lengua cooficial al lado del catalán. Vidal ha dejado para el sábado los detalles concretos, como podrían ser el grado de uso y reconocimiento práctico que destina al castellano esta cooficialidad que propone su "constitución", o qué propone para la defensa de esta hipotética Cataluña independiente sin ejército.
Además, el texto también contempla la posibilidad de obtener la doble nacionalidad -a partir del primer año tras la hipotética secesión-, y que los funcionarios de la Administración Central del Estado tengan un margen de tres años para decidir si se integran en la administración catalana o no.
El equipo liderado por Vidal propone igualmente que la eventual Cataluña separada del resto de España sea una "república no presidencialista" -más al estilo de Italia y Alemania que al de Francia, cabe suponer-, y un sistema electoral con listas abiertas. Además, se contempla que los ciudadanos puedan pedir una reforma constitucional tras presentar medio millón de firmas.
El CGPJ deniega su recurso
En el acto, el juez Vidal también ha hablado de su situación particular. Con una acción disciplinaria abierta contra él por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) -el órgano de gobierno interno del poder judicial en España-, justamente por elaborar esta propuesta de constitución para una Cataluña independiente, Vidal se enfrenta a las posibles sanciones de suspensión de empleo y sueldo durante tres años, traslado forzoso a otra Comunidad Autónoma o la expulsión definitiva de la carrera judicial.
En este sentido, Vidal ha explicado que el CGPJ ha rechazado sus últimas alegaciones -por "inútiles e impertinentes", según él-, y que espera que el órgano de gobierno de los jueces tome una decisión definitiva sobre su caso a mediados de febrero.