Al presidente de la Generalidad, Artur Mas, no le han sentado nada bien las filtraciones de las conversaciones que mantiene con el líder de ERC, Oriol Junqueras, de cara a un posible acuerdo para adelantar las elecciones. Fuentes del Ejecutivo autonómico han considerado que estas "versiones de parte" no son "la mejor vía para crear climas de confianza que permitan una buena negociación".
En concreto, a Mas le ha molestado que se hiciese pública su exigencia para que Junqueras renuncie a incluir a personalidades independientes en su candidatura a cambio de aceptar dos listas independentistas separadas. La oferta, en cambio, sí le permitiría a Mas llevar en su candidatura a esas personalidades independientes.
"Esta manera de hacer no ayuda y genera el efecto contrario"
Desde el Gobierno autonómico han reclamado "más diálogo y generosidad, y menos filtraciones", y han criticado que se haya roto la "discreción" que se había "convenido" sobre el contenido de la reunión.
"Esta manera de hacer no ayuda y genera el efecto contrario", han insistido, y han apelado a mantener "la actitud apropiada para construir la confianza que todos necesitamos y que debemos al país [por Cataluña]", según recoge la ACN.