Solo unos días después de que se eligieran los equipos locales de Podemos ya han surgido las primeras críticas al proceso participativo que ha utilizado la formación que lidera a nivel nacional Pablo Iglesias.

Nada más conocerse los resultados de las elecciones internas, los consejos ciudadanos municipales, empezaron a surgir las primeras preguntas -sobre todo, en internet- respecto al número de participantes y a un posible pucherazo de la dirección nacional.

En algunas de las poblaciones, el número de votos finales superaba al de los inscritos inicialmente anunciados. Ante esta situación, la dirección de Podemos matizó que este desfase o diferencia se debía a que "el censo no está actualizado en la web de resultados". Y pidieron disculpas a través de un comunicado.

Más allá de este, en principio, malentendido y de la polémica que ha rodeado al elegido en Barcelona, Marc Bertomeu, por su pasado independentista en una formación que -aun estando a favor de celebrar un referéndum secesionista- no es partidaria de la independencia de Cataluña, ha surgido otro inconveniente en Podemos: su representación femenina.

¿Dónde están las mujeres?

Así es, ocho de los diez primeros lugares elegidos en las primarias ciudadanas corresponden a hombres, y solo dos a mujeres. Un dato que no significa nada en concreto si no fuera porque desde Podemos se ha asegurado que al menos se consignaría el 40% de los puestos de liderazgo a las mujeres.

La preocupación ya ha hecho mella en la formación política. Gemma Galdon, que pertenece a la dirección de Podemos a nivel nacional, ha señalado a The Guardian que está preocupada con el resultado en este sentido pero esperará a que se constituyan "todos los órganos de Podemos antes de hacer una evaluación".

Sin embargo, Sergio Pascual, secretario de Organización de la formación, se ha mostrado más tranquilo y ha recordado que los resultados en las primarias de Podemos, en este aspecto, "son el reflejo de la sociedad en la que vivimos".

Mientras tanto, las encuestas siguen dando a Podemos una presencia sin precedentes en el próximo Congreso. Este domingo, La Razón auguraba que la formación liderada por Iglesias entraría en la Cámara Baja como tercera fuerza política y muy cerca del PSOE.