ERC insinuó la semana pasada, tras la imputación del ex presidente de la Generalidad Jordi Pujol, que podría forzar la comparecencia del presidente autonómico actual, Artur Mas, en la comisión parlamentaria sobre los casos de corrupción -y más específicamente, sobre el propio 'caso Pujol'-. Una amenaza insinuada que, finalmente, no se ha cumplido.
La Comisión de investigación del fraude, la evasión fiscal y la corrupción ha vuelto a rechazar este lunes, con los votos en contra de CiU y ERC, la petición de comparecencia de Mas, para que diera explicaciones sobre el presunto fraude de Pujol en calidad de ex consejero autonómico en los últimos ejecutivos del fundador de CiU. La petición la habían registrado conjuntamente los grupos del PSC, PP, ICV-EUiA y C's.
Al ya previsible voto en contra de CiU se ha sumado el decisivo de ERC, que ha 'salvado' a Mas de comparecer en esta comisión, a pesar de sus avisos de la semana pasada. Así, el martes pasado, el portavoz adjunto de ERC en el Parlamento autonómico, Oriol Amorós, insistió a Mas para que tomara "la iniciativa" y compareciera, a petición propia y para dar explicaciones sobre el 'caso Pujol', en la comisión de Asuntos Institucionales.
ERC se justifica
Amorós precisó entonces que, si Mas no se presentaba ante esta menos conflictiva comisión -"una vía también válida", declaró-, podrían "matizar" su apoyo a CiU para vetar su presencia en la comisión de corrupción. Un matiz que no se ha producido. Y Amorós lo ha justificado hoy en casi los mismos términos, cuando ha recalcado que su grupo sí desea la comparencia de Mas, y que espera en que este dé el paso de comparecer a petición propia en la Comisión de Asuntos Institucionales.
A cambio, ERC ha introducido un mucho más ligero 'matiz' en la votación de hoy: no ha secundado a CiU y ha votado con el resto de grupos para aprobar la petición de comparecencia de la hija menor de Pujol, Mireia Pujol. ERC sí que había rechazado anteriormente esta petición de comparecencia, junto a CiU, y ha explicado que su cambio de criterio se debe al hecho de que Mireia Pujol está ahora imputada.
Esta es la tercera vez que el Parlamento autonómico rechaza la comparecencia de Mas en la comisión de corrupción. La vez anterior, también gracias al apoyo de ERC, y en una primera ocasión, con el apoyo también del PSC, que votó sistemáticamente con CiU para vetar las peticiones de comparecencia de diversos dirigentes y ex dirigentes de ambas formaciones.