La familia Pujol ocultó a Hacienda 12,4 millones en patrimonio y 4,1 millones en renta. Así se detalla en la información enviada por la Agencia Tributaria al juzgado de Barcelona que investiga al expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, a su esposa y a sus siete hijos por presunto blanqueo de capitales.
El informe recoge las declaraciones complementarias relativas a los ejercicios 2010 a 2013 presentadas por Marta Ferrusola y seis de sus hijos (Marta, Pere, Mireia, Josep, Oriol y Oleguer) en julio pasado tras publicarse que escondían al fisco una fortuna en Andorra, y que precipitó la posterior confesión del patriarca del clan.
Para ponerse al día con Hacienda, los Pujol abonaron 1.755.508 euros en impuestos, mientras que, antes de admitir que habían ocultado dinero al fisco, les habían devuelto 7.694 euros.
Jordi Pujol y junior no han realizado declaraciones complementarias
Cabe destacar que ni Jordi Pujol Soley -el expresidente autonómico- ni su primogénito, Jordi Pujol Ferrusola -conocido como júnior-, realizaron ningún tipo de regularización fiscal.
De hecho, Jordi Pujol Ferrusola tiene abierto en la Audiencia Nacional un proceso penal por presunto delito fiscal y blanqueo, por lo que una declaración complementaria no le permitía esquivar las responsabilidades penales.
Afloran rentas por más de 4 millones de euros
En su regularización, Mireia reconoce que en 2010 ingresó más de 1,1 millones de euros, mientras que solo declaró 21.000 euros. Marta Ferrusola y Oleguer, ingresaron cerca de un millón de euros, pero declararon menos de un tercio.
Por su parte, Pere obtuvo rentas por 800.000 euros en 2010, y no por 200.000, como había declarado. Y Marta Pujol ingresó más de 600.000 euros, aunque solo declaró 16.000.
El patrimonio de Oleguer pasó de 5 a 9 millones
En cuanto al patrimonio ocultado, sobresale el caso de Oleguer. Entre 2011 y 2012, su patrimonio se disparó de 5 a 9 millones de euros. El benjamín de los Pujol está imputado por un presunto delito de blanqueo de capitales relacionada con la compraventa de unas oficinas del Banco Santander.
La matriarca de la familia, Marta Ferrusola, afloró un patrimonio oculto de 1,5 millones. Y el resto de miembros confesó haber ocultado cerca de un millón de euros, destacando el caso de Mireia, cuyo patrimonio pasó de 300.000 a 600.000 euros entre 2011 y 2013.