El director de TV3 firmó un contrató con Godó tres meses después de ser fichado

El director de TV3, Eugeni Sallent, cometió una irregularidad que favoreció a su anterior empresa, el Grupo Godó, apenas tres meses de abandonarla para fichar por la televisión pública autonómica. Esto es lo que desvela un informe de la Sindicatura de Cuentas sobre los últimos tres ejercicios de Televisió de Catalunya (TVC), hecho público recientemente.

Según reza el informe, el 9 de julio de 2012 Sallent, como director de TVC, "suscribió un contrato de adquisición de guiones para una segunda temporada de una producción dramática con la empresa donde había sido directivo antes de su nombramiento", en alusión al Grupo Godó, donde ocupaba un puesto de máxima responsabilidad: director general de Radiocat XXI, la empresa de Godó que gestiona sus emisoras de radio, RAC 1 y RAC 105.

Según recuerda el informe, la firma del contrato "infringe el artículo 28.2.e de la ley [autonómica] 30/1992, de 26 de noviembre, de régimen jurídico de las administraciones públicas y del procedimiento administrativo común, que regula las causas de abstención de los cargos públicos".

Dicho artículo detalla las circunstancias en que "las autoridades i el personal al servicio de las administraciones" deben abstenerse de "intervenir" en un procedimiento. Siendo una de estas circunstancias "tener relación de servicio con persona natural o jurídica interesada directamente en el asunto, o haberle prestado en los dos últimos años servicios profesionales de cualquier tipo y en cualquier circunstancia o lugar".

En Godó, menos de tres meses antes

La limitación que especifica la ley se da plenamente en el caso de Sallent, que ocupó un puesto de alta responsabilidad en el Grupo Godó hasta su nombramiento como director de TVC, el 25 de abril de 2012, apenas dos meses y medio antes de firmar el contrato que denuncia la Sindicatura de Cuentas.

De hecho, el nombramiento de Sallent fue mal recibido en algunos sectores precisamente por provenir del Grupo Godó. Solo dos meses antes de su fichaje, un manifiesto de trabajadores de TV3 pronosticó que, con la entonces reciente reforma de la CCMA, "todas las decisiones estratégicas las decidirá una mayoría muy afín a grupos mediáticos privados, que hoy reclaman la desaparición de la publicidad de Catalunya Ràdio y mañana reclamarán la de TV3".

El manifiesto de los trabajadores de TV3 fue interpretado entonces como una obvia referencia al Grupo Godó, haciéndose eco de diversos rumores e informaciones que apuntaban a que se perseguía un debilitamiento de TVC y Catalunya Ràdio para superar los problemas que arrastraban 8TV y los otros canales del grupo, y para consolidar el liderazgo de RAC1 en la radio en catalán.