El Rey llama a construir "una España alejada de la división y de la discordia"

El Rey Felipe VI ha hecho este viernes un llamamiento a construir "una España alejada de la división y de la discordia" y ha advertido de que "todos, ciudadanos e instituciones, estamos sometidos, por igual, al mandato de la ley".

Durante la ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias 2014, Felipe VI ha señalado que "respetar y observar ese marco constitucional y democrático es la garantía de nuestra convivencia en libertad; es la garantía necesaria para que todos los españoles puedan ejercer sus derechos, para que las instituciones y los ciudadanos cumplan con sus deberes y asuman sus responsabilidades, y para que funcione ordenadamente nuestra vida colectiva". Y ha insistido en que "debemos también cuidar y favorecer nuestra vida en común".

"El deber y la necesidad de garantizar y revitalizar nuestra convivencia"

En su intervención, el Rey ha destacado "el deber y la necesidad" que todos los españoles tienen "de garantizar y -al mismo tiempo- de revitalizar nuestra convivencia".

"Nuestra democracia -desde hace ya más de 35 años- no es fruto de la improvisación, sino de la voluntad decidida del pueblo español de constituir España en un Estado social y democrático de derecho, inspirado en los principios de libertad e igualdad, de justicia y pluralismo".

"Sintámonos orgullosos de lo mucho y bueno que juntos hemos hecho"

En ese sentido, Felipe VI ha instado reconocer las "luces y sombras" de la historia de España para apreder de ellas y "no cometer ni repetir los errores del pasado" poruque "el caudal de progreso que hemos conseguido con el empuje de todos, especialmente en las últimas décadas, jamás lo había alcanzado España en tantos ámbitos".

"Sintámonos pues orgullosos de lo mucho y bueno que juntos hemos hecho", ha remachado.

"Compartimos intereses y valores comunes"

El Rey ha destacado que "no sólo compartimos historia", sino que "compartimos intereses y valores comunes; tenemos una misma voluntad de pertenecer a Europa, de ser Europa; y sobre todo, compartimos sentimientos; los españoles ya no somos rivales los unos de los otros, somos protagonistas de un mismo camino".

"Estoy convencido de que la comprensión, la consideración, el afecto y el respeto mutuos son sentimientos arraigados en el corazón de los españoles y compartidos de norte a sur y de este a oeste de nuestro territorio. Y todos esos sentimientos, ni los debemos olvidar nunca, ni mucho menos perder. Al contrario, los tenemos que preservar y alimentar", ha añadido.

"Fortalecer nuestra vida en común"

Por todo ello, ha indicado que con "esa conciencia social, es con la que debemos fortalecer nuestra vida en común". "Es con ese necesario impulso moral colectivo con el que se puede y se debe hacer de España una nación ilusionada, llena de vida y de pensamiento; llena de ideas que merezcan la confianza de los ciudadanos; de proyectos que atraigan la mente y la voluntad de todos y conquisten sus corazones", ha subrayado.

Y ha considerado que "a partir de esas convicciones alejaremos el pesimismo, la desconfianza y el desencanto de muchos ciudadanos que demuestran, admirablemente, una capacidad de esfuerzo y de sacrificio digna de todo respeto".

"Trabajemos, cada uno con su propia personalidad, en un proyecto integrador"

Felipe VI también ha animado a valorar "lo que estamos haciendo, -con un enorme sacrificio y esfuerzo por parte de muchos españoles-, para superar todos juntos una de las crisis económicas más profundas de nuestra historia reciente".

"Seamos conscientes de que, como cualquier sociedad avanzada, debemos afrontar nuestro futuro con la fortaleza que nos exige un mundo distinto al que hemos conocido; un mundo que camina hacia una mayor integración y no al contrario. Es un futuro complejo, claro que sí; pero lleno de nuevas oportunidades. Ese es uno de los grandes retos que tenemos como país. Trabajemos pues, cada uno con su propia personalidad, en un proyecto integrador, sentido y compartido por todos, y que mire siempre hacia adelante", ha finalizado.