El presidente de la CEOE, Joan Rosell, ha denunciado este martes que "la gestión económica" que ha llevado a cabo el Gobierno autonómico de Cataluña en los últimos años "no ha sido mala, es que ha sido catastrófica", por lo que ha señalado que "alguien lo tiene que analizar" y "alguien tiene que decir cómo lo han hecho para estar tan mal".
En una entrevista en Onda Cero, Rosell ha criticado que mientras que durante el tripartito la Generalidad tenía una deuda de unos 10.000 millones euros, esta ahora asciende a más de 60.000 millones, y ha advertido de que "Cataluña tiene que hacer los deberes".
La secesión de Cataluña la dejaría en una situación financiera muy delicada
El presidente de la principal patronal española también ha advertido de que la independencia dejaría al Gobierno de un virtual nuevo Estado en una situación financiera muy delicada, y que en la actualidad la Generalidad se está financiando gracias al Gobierno.
"Y otro dato más importante, alrededor del 50% de toda la deuda catalana [de la Generalidad] está en manos del Estado español, por tanto, en el momento que el Estado español dijese "oiga, no le renuevo la deuda que tengo en mis manos", pues el invento se acabaría" ha añadido.
"Podrían producirse" deslocalizaciones en caso de independencia
Preguntado sobre la posibilidad de que CaixaBank y Banco Sabadell se marchasen de Cataluña si ésta se independizase, Rosell ha remarcado que "si alguna de estas instituciones financieras estuvieran fuera de la órbita del Banco Central Europeo (BCE), no podrían ser servidas, ayudadas ni financiadas por el BCE y eso seria un hándicap para esas empresas".
El presidente de la CEOE ha indicado que "todavía, en este momento, no hay datos estadísticos importantes concretos que digan" que está habiendo deslocalizaciones de empresas a causa del proyecto secesionista. Pero ha admitido de que, en caso de independencia, esto "podría producirse", ya que los empresarios "siempre valoramos por encima de cualquier otra cosa la estabilidad".
El principal malestar social es por la crisis económica
Rosell ha apuntado alguno de los motivos de la intensificación del independentismo: "En estos momentos la ciudadanía en Cataluña está excitada, está preocupada, hay un malestar social muy importante, pero que es básicamente por la crisis económica. A la crisis económica le hemos añadido el tema del nacionalismo y eso ha explotado".
En cualquier caso, no ve que la situación sea irreversible, "pero para eso hay que explicar cómo hemos llegado a aquí". Entre esas razones ha apuntado el alto grado de ineficiencia del actual Estado de las autonomías y supuestos agravios entre territorios a los que no se les da ninguna explicación. "Hay un déficit de explicaciones brutal, increíble. La gente es sensata, pero para eso hay que explicarle las cosas todos los días", ha concluido.