Pujol dice ahora que comparecerá "el día que me digan"

El ex presidente de la Generalidad Jordi Pujol ha variado sensiblemente su posición respecto a su próxima comparecencia ante el Parlamento autonómico, para dar explicaciones sobre su fraude fiscal continuado durante 34 años, y confesado por él mismo. Si esta semana cuando la Cámara autonómica aprobó por unanimidad su petición de comparecencia, se mostraba exigente con las fechas, ahora ha asegurado que acudirá el día que fije el Parlamento autonómico.

En unas brevísimas palabras a la prensa apostada a la puerta de su domicilio en Barcelona, Pujol se ha mostrado dispuesto a comparecer "el día que me digan". "Hoy no haré más declaraciones", ha añadido.

El día anterior, también en declaraciones a la puerta de su casa, el tono de Pujol había sido muy diferente. Recordó que ya había manifestado su disponibilidad para comparecer en el Parlamento autonómico -pero recalcando que no tenía esa obligación, y que lo hacía por "respeto" a la institución-, e instó a la Cámara autonómica a buscar un acuerdo sobre "la fecha" de su comparecencia.

Pretendía comparecer el dia 22

Aun más exigente había sido este martes, cuando, en una carta dirigida a la presidenta de la Cámara autonómica, Núria de Gispert, había sugerido el 22 de este mes de septiembre (o los días posteriores) como fecha para comparecer, aduciendo que no quería interferir en la vida política, y que ese día está lejano tanto del 9 de noviembre -fecha fijada por los partidos proconsulta para el hipotético referéndum independentista- como de la Diada, el Debate de Política General y la aprobación de la Ley de Consultas.

Ese mismo martes, la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlamento autonómico aprobó por unanimidad -CiU se sumó a la petición de la oposición en bloque- la comparecencia de Pujol para que este de explicaciones sobre su fraude fiscal confeso.

Pujol reconoció el pasado 25 de julio que su familia -su esposa y sus siete hijos- han estado evadiendo a Hacienda "un dinero ubicado en el extranjero" que heredaron de su padre en 1980 y del que él fue "responsable legal". La confesión se produjo después de múltiples informaciones publicadas en los medios los últimos dos años acerca del dinero del clan Pujol en paraísos fiscales, y en un momento en que algunos de sus hijos -muy especialmente el mayor, Jordi Pujol Ferrusola, ya imputado- están siendo investigados por la justicia.