Carod confiesa saber que las comisiones ilegales en CiU podían alcanzar el 5%

El ex presidente de ERC Josep Lluís Carod-Rovira ha asegurado este viernes que un dirigente de CiU le confirmó la existencia de comisiones ilegales para financiar al partido nacionalista, pero que estas no eran del 3%, como denunció el ex presidente de la Generalidad Pasqual Maragall, sino del 5%.

Carod, en una entrevista para Radio Euskadi, ha afirmado lo siguiente:

"Cuando denuncié el 3%, unos años antes de que lo hiciera el [ex] presidente [autonómico] Maragall, al terminar la sesión en el Parlamento [autonómico] alguien muy importante de CDC en aquellos momentos se me acercó y me dijo: 'Esto que has dicho es mentira, esto es una injuria, esto es una infamia, esto no es cierto, no es el 3%, que yo sepa es el 5%'. Yo me quedé atónito. Lo que más me sorprendió es la impunidad con que se trataban estos temas".

El ex líder independentista ha justificado su silencio a lo largo de estos años alegando que se veía "como un grano de arena en un desierto inmenso [...] sin medios para poder investigar ni poder hacer nada".

"Un mazazo en medio de la cabeza"

Carod ha valorado, no obstante, que "a todo el mundo" le habían llegado "los rumores" sobre irregularidades del entorno familiar del fundador de CiU y CDC. Lo cual no es óbice para que el ex líder de ERC haya apuntado que la confesión de Pujol de su fraude fiscal continuado representa "un mazazo en medio de la cabeza".

A su juicio Pujol formaba parte del "paisaje de Cataluña". "Era catalanista, demócrata, europeísta, antifranquista... por lo tanto lo tenía todo", ha lamentado Carod, quien ha abundado en la interpretación ya extendida en medios independentistas de que la actitud delictiva confesada por el 'padre' del nacionalismo catalán contemporáneo es "más un golpe moral que político".

Finalmente, Carod también se ha sumado a quienes consideran que las investigaciones recientes sobre Pujol y el resto de su familia se deben a que, al posicionarse a favor de la secesión, el ex presidente de la Generalidad "cuestionaba la integridad territorial del Estado español".