SCC pide a Rajoy "propuestas concretas y acordadas"

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha reunido este lunes en la Moncloa con una delegación de Sociedad Civil Catalana (SCC) formada por su presidente, Josep Ramon Bosch, y sus tres vicepresidentes, Joaquim Coll, José Rosiñol y Susana Beltrán, y en la que también ha participado el jefe de Gabinete de Rajoy, Jorge Moragas.

SCC -que ha calificado el encuentro de "cordial" y ha agradecido la "receptividad" de Rajoy a sus "planteamientos"- ha explicado al presidente del Gobierno los motivos de la creación de la entidad ("dar voz a los catalanes que no desean la ruptura con el resto de España") y le ha trasladado la necesidad de "superar el debate secesionista, un debate agotador que nos distrae de los verdaderos problemas sociales y económicos de los catalanes".

"Hacer más integrador y atractivo el proyecto común" español

"Rechazamos los discursos, palabras o gestos, en un sentido u otro, que crean división y siembran discordia, o intentan fomentar el desapego de los catalanes con el resto de españoles y viceversa. Rechazamos tanto a los separatistas como a los separadores", ha señalado Coll en una rueda de prensa posterior al encuentro.

SCC ha insistido en que "no nos limitamos únicamente a decir 'mejor juntos', sino a afirmar 'juntos y mejor' porque creemos que la primera condición para desactivar la tensión secesionista es hacer más integrador y atractivo el proyecto común, y este es un objetivo que el Gobierno español, sea del color político que sea, tiene la obligación de liderar y tener presente en todas sus políticas y mensajes".

"La sociedad catalana desea propuestas con soluciones concretas y acordadas"

La entidad ha denunciado que "la firma del decreto de la consulta anunciada para el 9 de noviembre por parte del presidente de la Generalitat es una grave irresponsabilidad, no solo porque sea ilegal y, por tanto, no vaya a materializarse, sino sobre todo porque el proceso carece de legitimidad y garantías democráticas".

Por ello, consideran que "más allá del debate sobre la consulta, lo fundamental es que los responsables políticos delimiten cuanto antes las cuestiones que deben resolver". "Creemos que la sociedad catalana desea propuestas con soluciones concretas y acordadas en lugar de tener que dar respuesta a preguntas existenciales o a disyuntivas agónicas", han añadido.

"Todos los problemas deben ser objetivados y tratados con rigor"

SCC también ha instado a "que todos los problemas planteados, desde la financiación hasta las cuestiones lingüísticas, sean objetivados y tratados con rigor".

Y no se posicionan a favor de ninguna "fórmula concreta" sobre "si hay que acometer reformas más globales en la perspectiva del medio y largo plazo", pero tampoco se oponen a ninguna de ellas.

Cualquier propuesta debe ser "clara", consensuada y resolutiva

Aunque sí que exigen "algunas condiciones para cualquier propuesta": "Que sea clara, que pueda generar un gran consenso, que respete la Constitución o los caminos para su reforma, y que no se plantee como una estrategia para ganar tiempo o para contentar a los soberanistas, sino para resolver cuestiones de interés para el conjunto de los ciudadanos españoles y para mejorar el funcionamiento de las instituciones y muy particularmente del modelo autonómico".

Finalmente, animan a que "se establezca un diálogo abierto, transparente y plural, y la vuelta a un necesario entorno de respeto y cordialidad entre los actores políticos".