La presión popular empieza a tener efectos tangibles. Después de las críticas lanzadas al Gobierno de Rajoy por haberse excedido a la hora de conceder indultos, este parece que empieza a reaccionar.

Una muestra de ello sería la retahíla de rechazos a toda una serie de peticiones de indulto que se han conocido este viernes. La más significativa ha sido la del ex ministro y ex presidente autonómico de Baleares Jaume Matas (PP), que deberá cumplir los nueve meses de cárcel a los que fue condenado por corrupción.

Pero Matas no es el único caso mediático que se ha visto afectado por el cambio de criterio del Gobierno. El Ejecutivo también ha denegado el indulto al juez Baltasar Garzón, al ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, al ex dirigente de las juventudes del PP Ángel Carromero, al torero José Ortega Cano, al periodista Antonio Alemany, y al ex dirigente de UDC Lluís Gavaldà.

En la mayoría de los casos, los informes de los tribunales sentenciadores y de la fiscalía eran contrarios a que se les concedieran las medidas de gracia solicitadas, una circunstancia que, en ocasiones anteriores, no había impedido la concesión de indultos en casos similares.