La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) ha concluido, en el último informe que ha presentado ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca, que el responsable de actuar "con engaño" ante Hacienda fue Iñaki Urdangarin, y no las empresas que le retribuyeron por servicios de asesoría, quien de este modo defraudó un total de 337.138 euros en las cuotas del IRPF correspondientes a los años 2007 y 2008.
A través de largo informe, la AEAT subraya que "el incumplimiento de la obligación de retener" resulta "claramente achacable" al esposo de la Infanta Cristina, e insiste en que semejante actuación irregular "no fue precisamente ideada por las empresas, sino por el propio Urdangarin", a quien atribuye un "artificio defraudatorio" para tributar menos en su declaración de la renta.
"En suma, queda acreditado que nos hallamos ante un artificio defraudatorio que las empresas pagadoras se limitaron a asumir, pero que de ninguna forma les es imputable", subraya el informe, que hace hincapié además en cómo, de forma paralela, Urdangarin percibía como persona física rendimientos de trabajo procedentes de Telefónica Internacional por su pertenencia al Consejo de Administración. "Ello conduce a considerar que conocía perfectamente cuál era la recta tributación de tales percepciones", remacha al respecto.