El presidente de la Generalidad, Artur Mas, acostumbrado últimamente a recibir críticas a su proyecto independentista, o, en el mejor de los casos, frialdad, por parte del tejido empresarial catalán, ha podido contar hoy con un apoyo casi explícito: el del presidente de la multinacional farmacéutica Grífols, Víctor Grífols.
"Sé que está pasando por una situación difícil, pero tiene determinación, así que vaya hacia adelante y no se arrugue", ha dicho Grífols a Mas, en presencia de este, durante la presentación de la nueva planta de la compañía en Parets del Vallès (Barcelona).
Grífols, de hecho, no ha mencionado directamente la posibilidad de la independencia -como tampoco lo hace nunca explícitamente Artur Mas-. Pero sí que ha comparado el proceso hacia la hipotética consulta secesionista -de improbable celebración- con las dificultades que sufrió su empresa en su primer intento de salir a bolsa.
"Firmeza y determinación"
"Cuando una organización tiene un objetivo claro y una idea clara para su futuro, no hay que asustarse por las críticas que cuestionan la estrategia o la razón de ser", ha dicho, Grífols, que ha pedido a Mas "firmeza y determinación".
El propio Mas ha usado el mismo símil, aplicado a Cataluña. Ha asegurado que Cataluña tiene que insistir en aquellos proyectos en los que haya "fracasado", porque, en esta casos, hay dos opciones: "agachar la cabeza o enfrentarse a las circunstancias y continuar, y lo que no ha salido una vez, volverlo a intentar".