El consejero de Salud, Boi Ruiz, ha dado este jueves una explicación al fracaso escolar que no tiene nada que ver con la disminución de recursos en las escuelas -fruto de los recortes en servicios sociales del Gobierno de la Generalidad-, o a otros elementos a priori más directamente relacionados con la enseñanza. En cambio, ha hablado del consumo de cannabis.
Ruiz, en respuesta en el Parlamento autonómico a una pregunta del PSC sobre la regulación de las asociaciones de consumidores de cannabis, ha sostenido que "parte importante de nuestro fracaso escolar" se explica porque los estudiantes fuman esta sustancia.
El consejero ha explicado que el cannabis no desaparece del cuerpo hasta después de 21 días de ser consumido, y que, por lo tanto, "fumar cannabis el fin de semana provoca un efecto acumulativo de unas consecuencias en salud y en capacidad cognitivas muy importantes".
Desincentivar el consumo
Dejando de lado las cuestiones educativas, Ruiz ha recalcado que, aunque fumar -tabaco y cannabis- es una decisión individual de cada persona, el Gobierno autonómico tiene que desincentivar su consumo. "Fumar es malo, y fumar cannabis, también", ha dicho. "Tenemos que intentar que quien decida fumar cannabis lo haga con consecuencia y responsabilidad", ha añadido.
Boi Ruiz no es el primer consejero que se refiere al consumo de cànanbis de los estudiantes. En el año 2009, el entonces consejero de Educación, Ernest Maragall (exPSC, ahora a NeCat), lamentó que hay alumnos que "llegan a las nueve de la mañana habiendo fumado un primer porro". "Y bastantes más de lo que nos decimos a nosotros mismos", añadió.