Agbar exhorta a la Generalidad a ejecutar las resoluciones judiciales que le dan la razón en el contencioso sobre la concesión de Aguas Ter-Llobregat (ATLL).
"El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) nos ha dado la razón ya tres veces. La Generalidad ha de ejecutar la sentencia", ha exigido el presidente ejecutivo de Agbar, Ángel Simón, en una entrevista realizada este jueves en Catalunya Ràdio.
"Nosotros en el cuadro técnico superamos a Acciona largamente, y en el cuadro económico -es aquí donde nosotros impugnamos- el Órgano Administrativo de Recursos Contractuales de Cataluña (OARCC) dijo que el programa de inversiones que había hecho Acciona no se adecuaban al pliego de cláusulas. Nos dio la razón", ha insistido.
Simón ha rechazado que la Generalidad tenga "ninguna dificultad" en ejecutar las sentencias, como ha alegado. Y ha rechazado que Agbar esté negociando para asumir cualquier posible indemnización que la Generalidad tuviese que abonar a Acciona por la anulación de la concesión, por lo que ha asegurado estar "absolutamente tranquilo" con el proceso.
"Decidir dentro de las normas legales democráticas"
Por otra parte, Simón fue uno de los empresarios que el pasado martes cenó con el Príncipe Felipe, pero ha evitado dar detalles de la reunión porque fue "una cena privada". Aunque sí que ha señalado que el heredero a la Corona "es una persona muy preparada, muy consciente".
"Yo encontré que él vino esencialmente a escuchar, cosa que pienso que es muy importante, porque no siempre en estas cenas la gente escucha. Yo he visto alguna de estas cenas en la que la gente habla, habla y habla, y en este caso no. En este caso el Príncipe Felipe escuchó. Yo creo que conoce perfectamente el país [por Cataluña] y que por tanto que tendrá una posición, la que él tenga que tener dentro de su marco constitucional", ha añadido.
Simón también ha señalado que no ha notado que el plan independentista de Mas haya afectado las relaciones empresariales:
"No lo he notado nada. Nosotros estamos en muchos lugares del mundo. Es cierto que algunos lugares del mundo me preguntan. Primero me preguntan si soy catalán, que evidentemente contesto que sí, como es obvio, no sólo soy catalán, sino que vivo en Barcelona, los fines de semana muchas veces. Y me preguntan por la cuestión, pero a nivel empresarial no ha afectado absolutamente nada. Es más, los analistas internacionales, cuando repasan tanto la empresa Agbar como Suez Environnement, no preguntan por la cuestión".
"A mí no me preocupa nunca en general que cada país decida lo que le parezca correcto dentro de las normas legales, democráticas, que se establezcan. Por tanto, en este sentido lo único que me preocupa, y no lo digo por la situación de aquí, sino en los diferentes países, es cuando ocurren situaciones de transición en las que no se asegura lo que es la confiabilidad en las inversiones que tú has hecho. El resto, yo creo que cada país puede escoger lo que quiera, y piense que estamos en 20 países diferentes del mundo, desde Estados Unidos, Chile, México, Colombia, por tanto no me puede asustar nada", ha añadido.