Una cena para "tender puentes"

El Príncipe Felipe ha cerrado este miércoles su mini gira de cuatro días por Cataluña con una visita al Monasterio de Poblet (Tarragona), donde ha presidido la reunión de la junta directiva de la Sociedad Bicentenario General Prim.

De la intensa agenda de su viaje se ha destacado la cena de bienvenida al Mobile World Congress (MWC), celebrada el domingo pasado, en la que se produjo un cruce de planteamientos con el presidente de la Generalidad, Artur Mas. El Príncipe aprovechó la ocasión para apelar al éxito de la "colaboración" institucional, mientras que el líder nacionalista se desmarcó con un discurso reivindicativo.

También ha sido muy sonado el desplante del empresario y ex candidato de Solidaritat Àlex Fenoll, un conocido activista independentista que se negó a saludar al Borbón durante una ronda protocolaria en el MWC.

Sin embargo, el encuentro que más expectativas ha generado ha sido la cena que el heredero a la Corona presidió anoche en la residencia barcelonesa del empresario Javier Godó, Conde de Godó, junto a una veintena de empresarios de Cataluña y de Madrid, mayoritariamente pertenecientes del denominado Foro Puente Aéreo.

Al ágape asistieron José Manuel Lara (Grupo Planeta), Juan María Nin (CaixaBank), Josep Oliu (Banco Sabadell), Salvador Alemany (Abertis), José Manuel Entrecanales (Acciona), Ángel Simón (Agbar), Luis Conde (Seeliger&Conde), Emilio Cuatrecasas (Cuatrecasas Gonçalves Pereira), Javier Monzón (Indra), Jaime Castellanos (Willis Iberia), Ignacio Garralda (Mutua Madrileña), Juan Miguel Villar Mir (OHL), Alberto Palatchi (Pronovias), Manuel Torreblanca (Barceleuro), Marc Puig (Puig), José María Xercavins (Tauro Real Estate), Antonio Vázquez (IAG), Enrique Lacalle (BMP y SIL), Luis de Carlos (Uría Menéndez), Juan Rosell (CEOE), Joaquim Gay de Montellà (Fomento del Trabajo), Rodrigo Rato (ex ministro), y Carlos Godó (Grupo Godó).

Discreción sobre el encuentro

Aunque poco ha trascendido del encuentro, algunas fuentes apuntan que Javier Godó pidió el esfuerzo de todos para dialogar y tender puentes entre Barcelona y Madrid.

Otras señalan que fueron los empresarios catalanes los que solicitaron la intermediación del Príncipe para desenrocar la actual situación de tensión generada por el proyecto secesionista de Mas. Aunque este habría respondido que se trata de una cuestión en la que la Corona tiene una influencia limitada.

También se han filtrado las quejas quejas de alguno de los presentes hacia el supuesto inmovilismo del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, frente al desafío independentista.

En lo que sí coinciden todas las fuentes es en que la cena transcurrió en un tono cordial y donde se compartieron posiciones esperanzadoras sobre una pronta superación de la crisis económica actual.

En todo caso, en los últimos tiempos sí que se ha detectado una intensificación de las visitas del Príncipe a Cataluña. Solo durante el año pasado, el heredero a la Corona viajó una docena de veces a esta Comunidad, lo que la convierte en la segunda más visitada por la Famlia Real, después de la de Madrid.