Varios colectivos han aprovechado, este lunes por la mañana, la inauguración del Mobile World Congress en Barcelona para llevar a cabo una protesta conjunta, en defensa de sus propias y heterogéneas reivindicaciones. Una protesta que ha contado sólo con dos simbólicos apoyos de los partidos de la izquierda catalana: Joan Mena (EUiA) y David Fernández (CUP).
La protesta múltiple ha congregado a unas 200 personas ante el recinto ferial de Gran Vía 2, en Hospitalet de Llobregat. Entre los manifestantes, trabajadores de Panrico -que han vendido bocadillos, para recaudar dinero para su caja de resistencia- y de Telefónica, integrantes del colectivo Stop Subidas, que se opone a las subidas de precio al transporte público, y de Bomberos Indignados, que integran bomberos de la Generalitat, y yayoflautas.
El alcalde de Barcelona, Xavier Trias (CiU), había llamado a no crear "demasiados problemas" en relación al MWC, porque este tiene "muchas novias", y si no, "se lo llevan a otro lugar". Tanto antes de las protestas como después, Trias había reconocido el derecho a manifestarse, pero siempre insistiendo en que había que tener "sentido común" y "respeto".
Mena recuerda el "derecho" de prostestar
El portavoz adjunto de ICV-EUiA, Joan Mena, ya había advertido por la mañana que su formación "no cederá al chantaje" de Trias, y había señalado que, si un trabajador ve afectadas sus condiciones tiene "derecho y obligación" de protestar. También havia confirmat que la formación daría su apoyo a las movilizaciones.
El diputado de la CUP David Fernández ha tomado la palabra ante los manifestantes, en un breve parlamento en que ha destacado que la organización del MWC ha costado "100 millones" de euros en dinero público, invertidos en un "contexto de crisis".
ERC no ha participado en las protestas, pero su número 2, Marta Rovira, las ha defendido, porque, según ha dicho en declaraciones a la prensa, entiende "que se expresen".
Contra la imagen de una "Barcelona fashion"
Lluís Ravell, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona, que apoya a Stop Subidas, ha remarcado que los colectivos que han protestado hoy han "hecho oir su voz", en contraste con la "imagen de una Barcelona fashion" que quiere "vender" la feria de móviles.
Previamente a la protesta, unas cuarenta personas han parado durante 15 minutos el tráfico de los convoyes de Ferrocarrils de la Generalitat en la estación de Plaça Espanya, una de las principales vías para llegar al MWC. Anteriormente, también se había cortado la circulación de la línea 3 del metro, en la estación de Drassanes.
Se prevé que estas movilizaciones, especialmente las de Stop Subidas, se repitan durante toda la semana.