El efecto dominó que desde la Generalidad temían que las últimas sentencias de los tribunales sobre bilingüismo escolar podrían generar ya ha comenzado. 151 familias de más de 60 colegios de toda Cataluña han registrado este lunes en la Consejería de Enseñanza otras tantas solicitudes para que sus hijos reciban la educación en las dos lenguas oficiales de Cataluña de forma equilibrada.

A mediados de enero, el Tribunal Supremo confirmó las medidas cautelares dictadas un año antes y ratificadas en marzo de 2013 después por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ordenando a la Generalidad que "adopte cuantas medidas sean precisas" para que un alumno reciba sus clases en ambas lenguas oficiales: catalán y castellano.

Y, el viernes pasado, el TSJC emitió cinco autos por los que ordena impartir, al menos, el 25% de las horas lectivas en castellano a otros tantos alumnos que habían reclamado educación bilingüe, incluyendo como mínimo una asignatura troncal y la de lengua y literatura castellana.

Ya hay más de 1.300 familias que han pedido educación bilingüe

Convivencia Cívica Catalana (CCC) ha recibido las peticiones de este centenar y medio de familias animadas por los últimos fallos judiciales, y ha coordinado el correspondiente registro de las solicitudes ante la Consejería de Enseñanza.

"Son numerosos los padres de toda Cataluña que se han puesto en contacto con nosotros para informarse y conseguir que sus hijos puedan recibir una enseñanza bilingüe", aseguran desde la entidad presidida por el profesor Francisco Caja.

Los colegios afectados están situados en múltiples localidades de toda Cataluña, entre las que destacan Barcelona, Badalona, Hospitalet, Cornellá, Esplugues, Granollers, Sant Cugat, Tarragona, Gerona, Valls, Vic, Montgat, Sitges, Igualada, Tarrasa y Sabadell.

Según CCC, con estas últimas peticiones son ya más de 1.300 familias las que han reclamado a la Consejería una enseñanza bilingüe para sus hijos a traves de la entidad en los últimos dos años, y prevén que, a partir de ahora, "se va a producir un goteo permanente" en esta línea.

La Generalidad pondrá todas las trabas posibles al bilingüismo

La consejera de Enseñanza, Irene Rigau (CiU), reconoció este lunes que han recibido alrededor de un millar de peticiones para recibir una educación bilingüe, pero anunció que seguirían utilizando todos los mecanismos legales a su alcance para evitar -o retrasar lo máximo posible- que estos alumnos puedan tener clases en catalán y en español.

"En todo caso sería [necesario] todo este proceso judicial, porque para llegar a aquí se necesita mucha constancia, porque esto no es: yo presento una instancia y ya está", aseguró, aunque fuentes jurídicas explicaron a CRÓNICA GLOBAL que las últimas decisiones judiciales han creado un precedente que aceleraría los futuros procesos.

Rigau también fue más allá y reveló cuál será la estrategia del Gobierno autonómico respecto a la inmersión: "Hemos de saber encontrar formas de hacer lo mismo pero de otra forma".

De hecho, el propio  consejero de la Presidencia y portavoz autonómico, Francesc Homs, declaró este martes que no moverán "ni una coma" del actual modelo de inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán, pese a las múltiples sentencias que ordenan lo contrario.