"Orgullo", "esperanza", "ganaremos"... ERC ha llenado este sábado el Auditorio de Fórum de Barcelona y una sala anexa. 4.000 personas se han reunido para apoyar a Oriol Junqueras y reclamar que "votar es la vía". Se celebre o no el referéndum convocado ya por Artur Mas de manera oficiosa, el líder de ERC también podrá decir que cumplió.
Aires de victoria es lo que se ha celebrado a las orillas del mar, en Barcelona, aun cuando todas las intervenciones -un mitin de ERC es una mezcla de buenrollismo y control de masas, cero corbatas, chistes y canciones de pop catalán- destilaban un olor a reivindicación, algo incompatible con el que se sabe que ha ganado.
Junqueras ha reconocido que "hasta el martes por la tarde" la posibilidad de un acuerdo con CiU, ICV-EUiA y la CUP "no pintaba muy bien, era difícil y muy complicado", y ha señalado que las dos preguntas planteadas por Mas el jueves es la "mejor" opción, pues se consiguió una "imagen" de "todos juntos, todos mezclados", entre "compatriotas" y "camaradas".
"Nunca habíamos tenido tanta fuerza"
La sensación es que Junqueras puede desdecirse de lo que quiera porque las encuestas le dan al alza y su parroquia se lo perdonará todo. Incluso renunciar y olvidarse de esa pregunta, única, clara, con la palabra independencia y binaria. Como en Escocia. Algo irrenunciable para ERC hace solo cuatro días. No importa. El Auditorio lo ha aclamado. Las encuestas le dan por encima de CiU.
"Nunca habíamos llegado tan lejos, nunca habíamos sido tantos y nunca habíamos tenido tanta fuerza". Junqueras ha transmitido a los suyos esa confianza del que le salen las cosas redondas. Con sinceridad. El mitin, preparado en un principio para presionar a CiU y a Mas, ha servido para confirmar que tampoco en ERC creían en al acuerdo en el Parlamento autonómico.
Pero también ha tenido tiempo para cargar contra el PP, el PSOE y el Gobierno, "esa fábrica de independentistas" a la que "cada día damos las gracias". Al cumplimiento de la ley, con la que responde el Gobierno y el PSOE, el líder de ERC lo ha definido como "amenaza" y le ha dado la vuelta: "Sus amenazas son una oportunidad extraordinaria. Cuando nos amenazan, nos cohesionan".
Los catalanes no independentistas tienen "alma de esclavos"
Antes de Junqueras han pasado por el escenario -presentados por Màrius Serra- Josep Maria Terricabras ("si queremos votar, votaremos"), el humorista Peyu (que ha llamado "facha" a José María Aznar y ha cargado contra el Rey), el juez Santiago Vidal ("no hay ninguna ley en el mundo que nos pueda impedir votar, tampoco las leyes españolas") y el actor Juanjo Puigcorbé ("ninguna Constitución está por encima de la democracia", ha cargado contra el PSOE y José Luis Rodríguez Zapatero y ha finalizado su discurso con un "Visca Catalunya Lliure!").
También han intervenido la periodista Empar Moliner (que ha tenido palabras de mofa contra Pere Navarro y ha calificado a los catalanes no independentistas como personas "con alma de esclavos") y el empresario Josep Maria Mainar (que ha criticado al "socialismo catalán" por no estar con CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP, y sí con el PP y Ciudadanos celebrando la Carta Magna y ha advertido: "Nos castigarán si nos independizamos pero también si no lo hacemos").
Sin embargo, solo uno de los presentes en el acto, aunque no ha intervenido, ha sido más ovacionado que el resto -al margen de Junqueras- y muy destacado: Ernest Maragall. Su entrada en el Auditorio, solo unos minutos antes del inicio del evento, ha sido respondida con los asistentes puestos en pie y aplaudiéndole. Su respuesta: puño en alto y sonrisa.