El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el de Cuba, el dictador Raúl Castro, se han dado la mano, este martes, durante el funeral de Estado en homenaje a Nelson Mandela, ex presidente de Sudáfrica, fallecido recientemente. El acto, celebrado en el estadio FNB de Johannesburgo deja para la historia el apretón de manos.
El gesto, sin precedentes entre los líderes de dos naciones en conflicto durante décadas, ha tenido lugar cuando Obama se dirigía hacia el estrado desde el cual expuso un discurso a los miles de sudafricanos presentes en la ceremonia -que se ha retransmitido por dos estadios de fútbol más del país y en directo por televisión a todo el mundo-.
Mandatarios de todo el mundo
Castro, que mostró una sonrisa al estrechar la mano del presidente estadounidense, también ha intervenido durante el evento, que se ha celebrado bajo una intensa lluvia en el estadio situado en el barrio de Soweto, en Johannesburgo, uno de los más humildes de la ciudad sudafricana.
Cerca de un centenar de mandatarios de todo el mundo, incluidos el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy (PP), y el Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, han asistido al oficio religioso oficial, que se ha convertido -a falta de datos oficiales- en uno de los más multitudinarios de la historia.