La Generalidad de Cataluña ha desmentido este martes una noticia publicada por el diario El Mundo, según la cual el Ministerio del Interior estaría trabajando en una propuesta para incorporar al Cuerpo Nacional de la Policía a agentes de los Mossos d'Esquadra descontentos con la deriva independentista del Gobierno autonómico. Un desmentido que, según la Generalidad, viene del propio Ministerio.

Según ha afirmado el consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno autonómico, Francesc Homs, en la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha telefoneado hoy mismo al consejero de Interior, Ramon Espadaler, para negar la veracidad de la noticia publicada por El Mundo.

El diario dirigido por Pedro J. Ramírez afirmaba que Interior ha detectado "malestar" y "hartazgo" en "sectores de los Mossos" por la "deriva separatista" del Gobierno autonómico, y que estaría trabajando en un proyecto para "incorporar a las Fuerzas de Seguridad del Estado a los "descontentos". El Mundo añade que está en poder del borrador del proyecto, y que este ha pasado ya por la mesa del ministro Fernández Díaz

Los Mossos, "ejército" de una Cataluña independiente

Según esta información, se trataría de facilitar que los agentes de las policías municipales y de la policía autonómica -pensando especialmente en estos últimos- tuvieran especiales facilidades para ingresar en el Cuerpo Nacional de Policía.

El diario añade que "hay un potente sector de los Mossos" que se opone a la "dinámica política actual" -en referencia a la deriva secesionista-, y que "rechaza de plano" afirmaciones "que escuchan a sus mandos", en el sentido de que la policía autonómica "se convertiría en el ejército de Cataluña si se produjera una situación de independencia".

En octubre de 2012, el entonces consejero de Interior, Felip Puig, en un acto con mandos de la policía autonómica, les animó a apoyar a la Generalidad en caso de secesión ilegal:

"Solo os he de decir una cosa, puede haber momentos, en el futuro, en el que haya un debate, que estoy convencido que será un debate político, democrático y pacífico, en el que haya gente que quiera contraponer una legalidad jurídica a una legalidad democrática, en el que se ponga en tensión la legalidad stricto sensu desde el punto de vista de una ley a la legitimidad de las decisiones de un pueblo o de unas instituciones. En esta tesitura es donde estoy convencido de que el cuerpo [policial] que ahora representáis estará como siempre al servicio del país [por Cataluña] y de sus instituciones. Por todo esto, quiero deciros que es evidente que estos cambios nos afectan en el interior de la propia seguridad como también, evidentemente, afectan a la seguridad en perspectiva y a los cambios que tiene el país [por Cataluña]".