Después de haberse estabilizado desde 2007, en 2012 en Cataluña ha incrementado el número de defunciones, según datos oficiales del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), órgano oficial de la Generalidad en materia de datos estadísticos.
"En el año 2012 -indica el Idescat- las defunciones en Cataluña han sido 62.766, un 5,3% más que en el año anterior. Este incremento supone una ruptura de la estabilización, ya que desde el 2007 el número de defunciones anuales se mantenía alrededor de 59.000".
He escrito montones de veces que un día u otro tendríamos datos dramáticos como estos. Pero no pensaba que fuera tan rápidamente. Tuve demasiada buena fe, cosa que se tiene que evitar cuando en la trinchera de enfrente hay personajes como Artur Mas, Andreu Mas-Colell y Boi Ruiz.
Ninguna explicación, excepto los recortes
Consultados dos epidemiólogos, me dicen que en 2012 no hubo hechos extraordinarios que puedan explicarlo, como un brote de una determinada enfermedad. Ambos, como otros médicos a los que he pedido su parecer, me dicen que no ven más razón posible que no sea la implementación por la Generalidad de los brutales recortes sanitarios.
Hay que recordar que las primeras pancartas de manifestaciones sanitarias afirmaban: "Los recortes matan". Añado que la disminución del acceso a la atención sanitaria por parte de muy amplios estamentos sociales está tan acreditada como por ejemplo lo es el aumento de la mortalidad.
El mismo Idescat, repito que órgano de la propia y recortadora Generalidad, afirma: "Una parte del incremento del número de defunciones del año 2012 está motivada por la excepcional elevada mortalidad del mes de febrero, 7.172 defunciones, en comparación con las 5.169 defunciones registradas en febrero del 2011, lo que representa un crecimiento interanual del 38,8%".
El mismo organismo de la Generalidad afirma que "la tasa bruta de mortalidad (defunciones por cada 1.000 habitantes) se sitúa en el 8,4‰ en Cataluña. Por ámbitos territoriales, las tasas más elevadas se registran en las Tierras del Ebro (10,4‰) y el Alto Pirineo y Arán (10,3‰). De las 41 comarcas, 27 superan la media catalana, y presentan los valores máximos El Pallars Jussà (16,3‰) y El Priorato (13,9‰)".
Como nota, digamos, de color, estos datos son resultado de la colaboración de la Idescat con la Consejería de Salud, la del siniestro Boi Ruiz. La consejería no dice nada.
Pacientes no yendo al médico por pobreza
Médicos que vinculan esta realidad estadística a los recortes me dicen que no están extrañados. Una médica de lo que queda del ICS me dice llorando:
"Cada día atiendo a pacientes que cuando les receto un medicamento me dicen: '¿Cuánto tendré que pagar?', o bien: 'Por favor recéteme lo más barato'. Antes de los recortes nunca había oído frases parecidas, que están convirtiéndose en la norma. También tengo muchos pacientes crónicos que han dejado de venir a visitarse, y no porque se hayan hecho de una mutua. No tengo ninguna duda de que 'los recortes matan'".
Respecto a las Tierras del Ebro, he escrito varias veces que, en cuanto al caciquismo, permiten recordar las descripciones del gran escritor Sebastià Juan Arbó. Significativamente, son paradigmas de aquellas tierras, enfermas crónicas de caciquismo, personajes clave de la actual sanidad catalana y sobre todo de CDC, como Manuel Farré, Joan Maria Roig y Francesc Sancho.
Aquella zona también sufrió muy directamente la actuación de Josep Prat, ex presidente del Instituto Catalán de la Salud (ICS) y hoy sometido a imputación judicial.
Finalmente, otra nota significativa. Consiste en el apoyo de la inefable ERC al presupuesto sanitario de la Generalidad. Parece que prefiera la independencia a la vida y la calidad de vida de los catalanes.