PSOE e ICV-EUiA han mostrado este sábado sus coincidencias y sus diferencias -especialmente estas últimas- sobre cómo afrontar la crisis política generada por el proyecto independentista promovido por CiU y ERC.
En un debate celebrado en Hospitalet (Barcelona), organizado por Federalistes d'Esquerres con el título 'Regeneración democrática y reforma constitucional', y moderado por al director adjunto de El País, Lluís Bassets, el exministro y dirigente del PSOE Ramón Jáuregui y el diputado de ICV-EUiA y exsecretario general de CCOO Cataluña Joan Coscubiela han expuesto sus puntos de vista ante cerca de 400 personas.
Coscubiela: el referéndum es imprescindible
Coscubiela ha señalado que "no hay proyecto federal creíble si no se acepta el derecho a decidir", que pasaría por la celebración de un referéndum independentista en Cataluña. Y ha señalado que "derecho a decidir no es solo independencia".
"Cualquier proyecto se ha de construir en positivo, no en contraposición a otro. Un proyecto federal no puede autoafirmarse contra un proyecto de independencia. Ambos proyectos deberían compartir dos cosas: la constatación del agotamiento del modelo autonómico y la exigencia de regeneración democrática", ha añadido el exsindicalista.
Y ha insistido en que "el peor de los escenarios" es el inmovilismo, ante lo que la izquierda debe actuar planteando "un pacto democrático, social y territorial". "Las instituciones españolas no pueden ofrecer nada a Cataluña si primero no le permiten votar y expresarse", ha zanjado.
Jaúregui: la solución es una reforma constitucional
Por su parte, Jáuregui ha señalado que el denominado "derecho a decidir" no es más que un eufemismo del "derecho de autodeterminación", que tiene por objetivo la independencia, y ha rechazado que las CCAA puedan decidir de forma unilateral la secesión de España.
En este sentido, ha destacado que, a diferencia del PSC, el PSOE no está a favor de ese "derecho a decidir" ni de la celebración de una consulta independentista. Y ha alertado de las consecuencias "incontrolables, inmanejables e incalculables" del proyecto secesionista que plantean CiU y ERC, empezando por una fractura social.
El dirigente del PSOE ha insistido en que la solución a la situación actual pasa por la reforma constitucional en clave federal que plantea su partido, y que conllevaría un "derecho a decidir" de los catalanes a la hora de elegir sus representantes en unas "Cortes constituyentes", votando sobre la reforma constitucional que se plantee y "sometiendo a referéndum el Estatuto surgido de esa reforma". En todo caso, ha reconocido que se trata de "una apuesta difícil", pero ha insistido en que es "viable" y ha augurado el éxito de la propuesta socialista.