La Generalitat de Cataluña tiene contabilizadas 2.621 personas que están a la espera de poder acceder a una plaza de residencia pública de gente mayor y 133 más, a la espera de poder ingresar en un centro de día.
Según datos oficiales facilitados por la consejera de Bienestar Social y Familia, Neus Munté, a fecha del 7 de agosto pasado, el departamento autonómico tenía contabilizados 8.437 solicitudes en lista de espera para acceder a una plaza pública de residencia de gente mayor, de las que 5.816 estaban ya ingresadas en un centro pero habían pedido su traslado.
"Muy difícil establecer un plazo"
De la misma manera, la Consejería tiene constancia de que hay 557 personas informadas en la lista de espera para acceder a una plaza de centro de día, de las que 424 ya están ingresadas en un centro pero no en el que solicitaron como primera opción y han pedido el traslado.
Munté responde así a varias preguntas del PP realizadas por escrito en el Parlament, pero no da respuesta al tiempo de espera para ser atendido por los servicios sociales en la lista para ingresar en un centro geriátrico.
La consejera señala que "es muy difícil establecer un plazo de tiempo de espera ya que, de acuerdo con el sistema de adjudicación de recursos, depende de diversos factores como el movimiento de bajas de un centro concreto o la demanda de plaza de cada centro".
17.000 fallecidos esperando una ayuda
Por otro lado, solo en Barcelona, entre el momento en que entró en vigor la conocida como Ley de Dependencia (2006) y el pasado 30 de junio, murieron 7.974 personas que habían pedido ser valoradas, y no lo fueron, para acogerse a las ayudas que permitía la norma; y otras 9.084 que pese a haber sido valoradas no se les pudo hacer el Programa Individual de Atención (PIA).
Munté, en otra respuesta parlamentaria, señala que en la capital de Cataluña, en ese periodo, 102.616 personas pidieron una valoración por parte de la Administración autonómica para acogerse a la Ley de Dependencia. Y, de esas, 91.332 personas fueron valoradas.